EL MERCADO DE LA MERCED
EL MERCADO DE LA MERCED
Es el más famoso de la Ciudad de México
El Mercado de la Merced es uno de los más antiguos y grandes de la CDMX, y tiene una rica historia que se remonta a varios siglos atrás. Hace más de cincuenta años fue el más importante del país. Te invito a que conozcas su interesante historia…
En la región donde está enclavado el Mercado de la Merced, había un intenso comercio del Imperio Azteca. Por cierto, cerca de ahí se encuentra el lugar que varias crónicas aseguran que estaba el nopal con el águila y la serpiente.
Hernán Cortés se asombró al ver ese mercado al aire libre que era mucho más grande que el mercado de Madrid y de muchas ciudades europeas. Con la Conquista decidió que siguiera sus actividades para abastecerse de alimentos.
Durante la Colonia, el barrio donde se encuentra era llamado La Merced porque ahí estaba en 1594 el Convento de Nuestra Señora de la Merced y fue un centro intenso de actividad comercial.
Alrededor del convento comenzaron a surgir puestos de mercado, que hicieron más grande el tianguis de manera que atrajo a comerciantes de diversas partes de la Nueva España que empezaron a ocupar las casas para poner sus negocios.
A lo largo del siglo XVIII, el área comercial alrededor del convento se expandió considerablemente, convirtiéndose en un importante centro de intercambio de productos, donde los comerciantes españoles convivían con los indígenas.
SE FUNDA EL PRIMER GRAN MERCADO
Fue hasta mediados del siglo XIX, se tomó la decisión de construir un mercado permanente en los terrenos del antiguo convento. Un inmueble grandísimo con infinidad de puestos fijos. La construcción se completó en 1880.
Ese primer Mercado de la Merced tuvo tanto éxito que a principios del siglo XX, fue el principal mercado mayorista de la Ciudad de México, abasteciendo de productos frescos, carnes, verduras, frutas, etc., a toda la Capital.
Y no era para menos, ya que en La Merced se vendía una gran variedad de productos, desde frutas y verduras hasta carnes, aves, pescados y productos manufacturados.
Y con el rápido crecimiento de la Ciudad de México, el Mercado de la Merced siguió expandiéndose bastante y se modernizó. Pero todavía faltaba un buen estirón, que se dio en 1957 cuando el presidente Adolfo Ruiz Cortínez inauguró el mercado de La Merced tal como lo conocimos hasta hace poco.
En los años de la pandemia, el mercado sufrió un brutal incendio que acabó con el techo y consumió buena parte de las naves, pero se reconstruyó a como vemos su fachada el día de hoy, por lo que tuvo qué remodelarse completamente.
Pero ahí sigue adelante, y vende miles de toneladas de mercancías, y la gente recuerda aquellos años en los que en ese lugar se mezclaban los sabores, olores y la vida cotidiana de los mexicanos.
Pero con la construcción de la Central de Abastos, en Iztapalapa, parte de la actividad mayorista se trasladó a este nuevo centro de distribución, lo que marcó un cambio en el papel de La Merced, pero sigue siendo un lugar importante.
EL MERCADO DE LA MERCED
En la Actualidad La Merced sigue adelante, negándose a morir, ya que es un mercado tan popular donde se puede encontrar una gran variedad de productos, desde alimentos frescos hasta artículos de uso diario.
Además, es un sitio muy pintoresco que atrae a gente de provincia que quiere conocer el mercado como a turistas que están interesados en conocer la cultura mexicana.
Lo único malo es que en ciertas partes hay inseguridad, pero los locatarios y las autoridades trabajan porque haya más control en las calles y en el mercado, y que sea un lugar seguro para todos.
Y a pesar de las transformaciones que ha sufrido a lo largo de los años, El Mercado de la Merced conserva su esencia y sigue siendo un lugar emblemático de la Ciudad de México pues es un reflejo de la historia capitalina.
Es todo un símbolo de la identidad mexicana que vale la pena conocerlo por si te animas a visitar su activo bullicio y comprar tu despensa y lo que necesites…
