Los aeropuertos de EEUU retoman la normalidad tras el fin del cierre gubernamental
Los aeropuertos estadounidenses comienzan a funcionar con normalidad luego de que las autoridades federales levantaran las restricciones impuestas durante el cierre de la Administración. Durante las semanas más críticas, la Administración Federal de Aviación (FAA) redujo el tráfico en 40 aeropuertos debido a la falta de personal, especialmente de controladores aéreos, quienes trabajaron sin recibir salario durante el paro gubernamental más prolongado en la historia del país.
Según la FAA, desde las 6 de la mañana del lunes las operaciones volvieron a los niveles previos al cierre.
Agradecimientos y próximos pasos
El secretario de Transporte, Sean Duffy, reconoció el esfuerzo del personal aéreo:
“Quiero dar las gracias al dedicado equipo de seguridad de la FAA por mantener nuestros cielos seguros durante el cierre más largo de nuestra nación”. Añadió que la institución podrá volver a centrarse en acelerar la contratación de nuevos controladores y en modernizar el sistema nacional de control de tráfico aéreo.
Retrasos menores y cifras del impacto
Pese a la reapertura, el panorama del lunes mostró más de 650 vuelos retrasados y unas 30 cancelaciones, causadas principalmente por condiciones meteorológicas o factores externos.
Durante el cierre, la cantidad total de vuelos dentro, hacia y desde Estados Unidos había caído un 6 %. Duffy incluso advirtió en su momento que hasta un 10 % podría quedar en tierra si no se alcanzaba rápidamente un acuerdo político.
Reducción de emergencias de personal
La FAA informó que las activaciones de emergencia por falta de controladores disminuyeron drásticamente tras el acuerdo de financiación. El 16 de noviembre se registró solo una activación, frente a las 81 contabilizadas el 8 de noviembre, el peor día del cierre.
El administrador de la FAA, Bryan Bedford, señaló que la mejora en el personal permitió anular la orden de reducción de tráfico y regresar a la normalidad.
Preocupación pre-Acción de Gracias
La incertidumbre aumentó la semana anterior, cuando millones de estadounidenses seguían de cerca los horarios de vuelo antes del feriado de Acción de Gracias. El acuerdo del Congreso evitó que los problemas se extendieran al periodo de viajes más intenso del mes.
Mike Arnot, portavoz de la firma Cirium, aseguró que el pago de los salarios atrasados a los controladores ayudará a estabilizar rápidamente los cronogramas, por lo que no anticipa afectaciones en la temporada festiva.
Las polémicas declaraciones de Trump
En medio del cierre, Donald Trump sugirió entregar 10.000 dólares a cada controlador aéreo que trabajara durante todo el periodo, aunque admitió no saber de dónde saldrían los fondos. En una entrevista para The Ingraham Angle dijo: “Siempre consigo el dinero de algún sitio”.
El epresidente también criticó duramente en redes sociales a los controladores que reportaron estar enfermos durante el cierre, insinuando que deberían enfrentar descuentos salariales y acusándolos de no apoyar al país frente a lo que llamó un “falso ataque demócrata”.
