La IA se une a la Arqueología y Revoluciona el Campo
No es secreto que la tecnología se volvió una parte fundamental en nuestras vidas diarias. Esto también se aplica a las ramas científicas, que cada vez tienen más herramientas para sus estudios. Ahora, gracias a la universidad de Yamagata, Japón, la IA se une a la Arqueología. Se acaba de hacer un increíble descubrimiento sobre el famoso desierto de Nazca, conocido por sus sorprendentes imágenes. El estudio fue publicado en la revista científica de PNAS
Un Hallazgo Sorprendente en Nazca
Científicos de dicha universidad usaron drones equipados con IA y lograron identificar más de 300 figuras nuevas. Estas figuras siempre han creado especulación entre la comunidad científica, ya que solo son visibles desde una perspectiva aérea y se encuentran dispersas por todo el lugar. Otro aspecto por el que son foco de estudio es que la gran mayoría plasman animales o seres que actualmente son desconocidos. Estos dibujos tienen cientos o miles de años y, en este contexto, se han descubierto en un enorme yacimiento de arte rupestre.
Métodos de Identificación
Los arqueólogos japoneses entrenaron a la IA usando varias imágenes ya existentes. En el proceso, se dieron cuenta de que las figuras tenían dos métodos de elaboración: piedras y líneas. En el primer método, simplemente alineaban piedras para crear los dibujos. En el segundo, hacían líneas en el suelo, raspando el terreno.
Gracias a esto, los drones pudieron identificar un total de 303 figuras nuevas. Con estos hallazgos, se declaró que actualmente el desierto de Nazca cuenta con 50 figuras hechas con el método de líneas y 683 con el método de piedras, antes mencionados.
Doble Beneficio para la Ciencia
Esto no solo enriquece el patrimonio de la humanidad, sino que también es un paso para que la tecnología se una cada vez más a ciencias como la arqueología, geología o paleontología. La IA se une a la Arqueología y los expertos desean seguir usando estos drones para ver si son capaces de encontrar aún más figuras o tesoros históricos. Este avance podría cambiar nuestra comprensión de la historia y abrir nuevas posibilidades en el campo de la investigación arqueológica.
