Irán minimiza el alto el fuego y advierte de un recrudecimiento del conflicto

La Chispa trae un nuevo reporte desde el corazón del conflicto en Medio Oriente: Irán minimiza el alto el fuego, asegurando que el país se encuentra en una “fase de guerra”. Rahim-Safavi, asesor clave del líder supremo Ali Jamenei y excomandante del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, afirmó que no hay ningún protocolo activo que limite el accionar militar iraní.
Según sus palabras, “el alto el fuego significa cesar las hostilidades, pero pueden volver a empezar”, lo que revela un panorama volátil y lleno de incertidumbre. Safavi enfatizó que la situación “puede cambiar en cualquier momento”, lo que sugiere que una nueva escalada no está descartada.
Irán minimiza el alto el fuego: ¿Una amenaza real o táctica geopolítica?
El contexto no puede ser ignorado. En los últimos días, las tensiones han aumentado notablemente entre Irán e Israel. Safavi dejó claro que no existen acuerdos vigentes con Estados Unidos o Israel, lo que eleva el nivel de riesgo regional. “Veo la posibilidad de una nueva guerra y, entonces, tal vez ya no haya otra”, advirtió.

Desde la base de Gulilat, al norte de Tel Aviv, Eyal Zamir, jefe del Estado Mayor del Ejército israelí, declaró que los recientes ataques fueron parte de una “ofensiva preventiva” y que están dispuestos a continuar la operación si es necesario.
China e Irán: Alianzas estratégicas en la sombra
Pekín está trabajando con Teherán para reconstruir su capacidad misilística, gravemente afectada por los ataques recientes. Esta colaboración forma parte de una estrategia mayor que podría alterar el equilibrio de poder regional. Además, informes del Departamento de Defensa de EE.UU. confirman que los ataques israelíes y estadounidenses han logrado retrasar el programa nuclear iraní por varios meses.
La tensión escala: ¿Una nueva fase de confrontación directa?
La derecha israelí ya está presionando para reanudar los bombardeos y “rematar el trabajo lo antes posible”. En este ambiente cargado, Irán minimiza el alto el fuego pero al mismo tiempo advierte que no se quedará de brazos cruzados.