CDMX acelera la transformación del taxi como pieza clave de la movilidad sustentable rumbo a 2026
La Ciudad de México avanza hacia un nuevo modelo de movilidad urbana en el que el taxi busca recuperar protagonismo como un servicio moderno, seguro y ambientalmente responsable. Con el arranque del Programa de Sustitución de Transporte Público Individual, el Gobierno capitalino inició la chatarrización de 300 taxis obsoletos, como parte de una estrategia más amplia que contempla la renovación de 800 unidades concesionadas y que se fortalecerá en 2026.
Durante la presentación del programa, la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, subrayó que la capital enfrenta diariamente el reto de movilizar a millones de personas: 17 millones de viajes al día, de los cuales alrededor de 600 mil se realizan en taxi, cifra que se eleva a casi un millón de traslados diarios si se considera la Zona Metropolitana del Valle de México. En este contexto, afirmó que dignificar y modernizar el servicio de taxi es una prioridad para garantizar una movilidad más equitativa.
Brugada señaló que la transformación del taxi forma parte de una visión de ciudad que apuesta por la electromovilidad, la reducción de emisiones contaminantes y el fortalecimiento del transporte público individual como una alternativa confiable frente a otras plataformas. “El taxi debe evolucionar y responder a las nuevas exigencias de la ciudad”, sostuvo.
Apoyos económicos y apuesta ambiental
El programa contempla apoyos directos para la adquisición de nuevas unidades, con montos diferenciados según el tipo de tecnología:
- 120 mil pesos para sustituir taxis de gasolina,
- 150 mil pesos para unidades híbridas, y
- 200 mil pesos para vehículos eléctricos.
De acuerdo con la mandataria capitalina, estos incentivos buscan acelerar la transición hacia un transporte menos contaminante y contribuir a mejorar la calidad del aire en la ciudad, al tiempo que se apoya la economía de las y los concesionarios.
Cuatro ejes para el taxi del futuro
Con miras a 2026 y al Mundial de Futbol, el Gobierno de la Ciudad de México anunció que el programa se reforzará bajo cuatro ejes estratégicos:
- Renovación del parque vehicular, priorizando unidades eléctricas e híbridas.
- Modernización tecnológica, mediante una aplicación que permita a los taxis competir con otras plataformas digitales y facilite a la ciudadanía la contratación del servicio.
- Seguridad integral para pasajeros y conductores, con sistemas de geolocalización, botones de pánico, videocámaras y monitoreo.
- Capacitación turística, para ofrecer un servicio acorde con la llegada de visitantes nacionales e internacionales durante la justa deportiva.
“Los taxis serán el nuevo rostro de la movilidad en la Ciudad de México”, afirmó Brugada, al destacar que este sector jugará un papel clave durante los eventos internacionales que albergará la capital.
Más unidades y precios accesibles
Por su parte, el titular de la Secretaría de Movilidad (Semovi), Héctor Ulises García Nieto, informó que ante la alta demanda de concesionarios interesados en renovar sus vehículos, en 2026 se incrementará a mil el número de taxis a sustituir. Asimismo, explicó que el gobierno capitalino mantiene diálogo directo con fabricantes de vehículos para reducir los costos de unidades híbridas y eléctricas, con el objetivo de hacerlas más accesibles para las y los trabajadores del volante.
García Nieto también adelantó que las 300 unidades renovadas estrenarán una cromática especial alusiva al Mundial de Futbol, evento del que la Ciudad de México será sede de partidos y de la inauguración.
Un servicio con identidad y función social
Desde el sector de los concesionarios, Josefina Nava Ruiz, representante de la asociación civil Sitios Unidos del Sur-Sitio 147 Tlalpan, destacó que la renovación del taxi va más allá del cambio de vehículo, pues implica ofrecer espacios más seguros, eficientes y dignos para quienes utilizan este medio de transporte.
Con este programa, la administración capitalina busca no sólo modernizar el parque vehicular, sino reivindicar al taxi como un símbolo urbano, fortalecer la movilidad sustentable y preparar a la ciudad para los desafíos de conectividad y atención turística que traerá el Mundial de 2026.
