Las pantallas pueden generar retraso en el desarrollo de los bebés.
La tecnología día con día se integra más a nuestras vidas y sin duda nos facilitan un montón de actividades pero no todo es positivo. Desde hace un tiempo los científicos han investigado las repercusiones de la tecnología en nuestra salud, especialmente en los niños. Un estudio recientes realizado en Japón demostró que las pantallas pueden generar retraso en el desarrollo de los bebés. Especialmente en las áreas sociales, en la comunicación, resolución de problemas y tolerancia a la frustración.
No son los primeros en llegar a la conclusión que la tecnología puede causar daños especialmente en los niños. Incluso algunos expertos trabajan para reducir y eliminar las adicciones a los celulares y dispositivos electrónicos. Países como China que limitaran el uso de dispositivos electrónicos en menores de edad. Pero si es la primera investigación en demostrar las repercusiones en bebés, específicamente a menores de 1 año.
Las pantallas pueden generar retraso en el desarrollo.
la Universidad de Sendai, Japón, realizó un estudio con más de 7000 bebés que sus padres los exponen constantemente a la tecnología. El estudio demostró que la gran mayoría de estos bebés tienen un severo retraso en varias áreas en comparación a otros con las mismas edades, pero que usan menos tecnología o no la usan para nada. Expertos dicen que el retraso puede ser hasta de 2 años.
El problema se agrava ya que muchos padres usan los celulares o tabletas como “niñeras”, suelen darle estos dispositivos a los bebés para que estén distraídos o dejen de llorar. Lo único que logran con esto es generar adicción desde muy temprana edad. Incluso pueden crear una nomofobia (miedo irracional a no tener un celular cerca o miedo a no poder usar uno). Esto afecta enormemente a la comunicación porque literalmente su único estimulo es una pantalla, esto hace que hablar con otros humanos se vuelva una tarea casi imposible.
Los expertos dicen que los bebés menores de 1 año deben tener 0 contacto con dispositivos electrónicas, mientras los que se encuentren ente los 2 y 5 años, pueden usar los dispositivos durante 2 horas diarias como máximo.
