La demanda de Johnson & Johnson por su talco para bebés, un caso histórico
La Chispa trae una noticia impactante sacude a la industria farmacéutica: Johnson & Johnson es demandada por su talco para bebés, un producto que durante décadas simbolizó confianza y cuidado familiar. Detrás de este ícono, se oculta un historial de documentos internos, denuncias legales y miles de demandas que revelan un conflicto entre ética corporativa y salud pública.
Darlene Coker y el inicio de la controversia
En 1999, Darlene Coker, una mujer texana de 52 años, fue diagnosticada con mesotelioma, un tipo de cáncer relacionado con la exposición al asbesto. Sin trabajar en industrias de riesgo, Coker buscó el origen de su enfermedad, descubriendo que el talco para bebés Johnson’s podría ser la causa. Su abogado rastreó los ingredientes y evidencias, llevando a la primera demanda pública que marcaría la historia de la empresa.
El talco, el asbesto y la responsabilidad de Johnson & Johnson
El talco y el asbesto coexisten naturalmente, y si el primero no se purifica correctamente, puede contener fibras microscópicas de asbesto. Con esta base, Coker demandó a la empresa por vender un producto “venenoso”. Aunque J&J negó las acusaciones, documentos internos revelaron que entre 1971 y 2000 detectaron pequeñas cantidades de asbesto en su talco, sin alertar al público ni a los reguladores.

Pruebas internas y manipulación de información
Desde 1957, laboratorios externos ya habían identificado trazas de tremolita en el talco de J&J. Durante décadas, la empresa repitió estudios confirmando la presencia de fibras, pero omitió esta información ante la FDA y otros organismos. Incluso en 1976 afirmaron falsamente que su producto estaba libre de asbesto. Esto evidencia que Johnson & Johnson es demandada no solo por negligencia, sino por encubrimiento.
Impacto en la salud y demandas millonarias
La OMS confirma que no existe un nivel seguro de exposición al asbesto. Miles de personas sostienen que el uso cotidiano del talco fue suficiente para enfermarles. Los tribunales en California, Nueva Jersey y Misuri han dictado sentencias multimillonarias, como el caso de St. Louis, donde 22 mujeres recibieron 4.690 millones de dólares. A pesar de ello, J&J ha apelado varios veredictos, defendiendo la seguridad actual de sus productos.

Controversia y defensa de la compañía
Los abogados de J&J argumentan que las muestras contaminadas son antiguas o industriales, y que algunos resultados adversos se deben a contaminaciones externas. La empresa sigue insistiendo en que su talco es seguro y libre de amianto, lo que mantiene la batalla legal y mediática en curso.
Legado de desconfianza y lecciones para la industria
El caso del talco de J&J expone un conflicto entre ciencia, ética y poder corporativo. Las pruebas muestran que la compañía conocía los riesgos, mientras las víctimas continúan buscando justicia. Aunque hoy el talco parece seguro, su historia queda marcada por Johnson & Johnson es demandada y por la desconfianza pública.
