México marca límites a Washington: Sheinbaum exige respeto y pruebas ante señalamientos financieros
La presidenta Claudia Sheinbaum fija postura firme ante acusaciones de lavado de dinero provenientes de Estados Unidos, en un gesto que reafirma la soberanía mexicana frente a su principal socio comercial.
Ciudad de México.– En un mensaje que trasciende lo financiero y toca el corazón de la relación bilateral con Estados Unidos, la presidenta Claudia Sheinbaum rechazó categóricamente actuar con base en acusaciones sin sustento, luego de que el Departamento del Tesoro estadounidense señalara a tres instituciones financieras mexicanas por presunto lavado de dinero vinculado al tráfico de opioides.
Sheinbaum fue enfática al exigir pruebas claras. “No vamos a proceder sobre supuestos. Si tienen evidencia, que la presenten; de lo contrario, no hay razón para intervenir”, dijo, dejando ver que México no aceptará ser tratado como socio subordinado.
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y la Secretaría de Hacienda recibieron reportes confidenciales del Tesoro y de FinCEN —la oficina estadounidense especializada en delitos financieros—, pero el contenido fue considerado insuficiente. Se hablaba de transacciones entre empresas chinas y mexicanas, sin elementos concluyentes. “Con China tenemos un comercio de 139 mil millones de dólares en 2024; esas transferencias no son, por sí solas, sospechosas”, argumentó la mandataria.
La Comisión Nacional Bancaria y de Valores revisó las operaciones de los bancos involucrados, encontrando únicamente faltas administrativas, no delitos. La UIF, por su parte, investigó a las compañías chinas citadas sin hallar irregularidades.
México marca límites a Washington: Sheinbaum exige respeto y pruebas ante señalamientos financieros
El pronunciamiento recuerda el caso del general Salvador Cienfuegos, arrestado en 2020 por la DEA y luego liberado por falta de pruebas, en lo que fue interpretado como un desliz diplomático de Washington. “No vamos a repetir errores del pasado”, dijo Sheinbaum.
El mensaje también fue político: Sheinbaum refrendó que la cooperación con Estados Unidos se mantendrá, pero con base en el respeto mutuo. “No somos piñata de nadie. México actúa con soberanía y dignidad”, afirmó, dejando claro que el gobierno federal no tolerará presiones externas disfrazadas de colaboración.
Además, destacó que México ha fortalecido su marco legal contra el lavado de dinero, con una reciente reforma aprobada en el Senado, y aseguró que el sistema financiero nacional es sólido y estable. “El peso se mantiene firme, la economía sigue creciendo y actuamos con responsabilidad”.
Este episodio se da en un momento clave, cuando México y Estados Unidos renegocian prioridades en materia de seguridad y migración. La postura mexicana deja ver un nuevo tono en la relación: colaboración, sí, pero sin renunciar a la autonomía.
