Perfil Político: 13 millones de mexicanos eligieron al nuevo Poder Judicial


Por Ricardo Pérez-Palacios Durán
La oposición llamó a no votar y tuvo eco en una buena parte de la población. Hasta 87% del padrón electoral se abstuvo de ir a las urnas. Sin embargo, los dirigentes de la derecha nunca les dijeron que dejarían la decisión a quienes sí hicieran válido su derecho de elección del próximo Poder Judicial. A ver ahora como les explican.
Podrán decir que “la farsa fracasó”, que es una minoría la que decidió e incluso tratarán de judicializar el proceso electoral. Lo cierto es que este mismo lunes tendremos los resultados que el Instituto Nacional Electoral avale para los ministros que integrarán la Suprema Corte de Justicia de la Nación, quienes fueron electos por 13 millones de mexicanos.
A diferencia del pasado en que una sola persona nombraba a los integrantes de la Corte y su decisión era avalada por 128 senadores, esta vez 13 millones de mexicanos lo hicimos, quienes no participaron tendrán que asumir las consecuencias.
Basta recordar que Ernesto Zedillo cerró la Suprema Corte de Justicia de la Nación el 1 de enero de 1995 y separó de sus cargos a 26 ministros mediante la figura de jubilación (millonaria) inmediata. En menos de un mes (26 días) firmó la iniciativa y promulgó las reformas a 20 artículos constitucionales aprobadas por senadores, diputados y la mayoría de los Congresos locales, cuya génesis tomó 52 días (del 5 de diciembre de 1994 al 26 de enero de 1995). Entonces no se escuchó cuestionamiento alguno.
¿Dónde estaban los intelectuales orgánicos, los comentócratas y pseudoperiodistas? La respuesta es muy fácil: en la nómina de la Presidencia de la República, oficial y no oficial.
Esos que dicen que “la farsa fracasó” son los mismos que avalaron el fraude electoral mediante el cual llegó a la Presidencia de la República Felipe Calderón en 2006 y descalifican a 13 millones de mexicanos. Incluso los presidentes de los partidos Acción Nacional, Jorge Romero Herrera (líder del Cártel Inmobiliario) y del
Revolucionario Institucional, Alejandro Moreno, minimizaron esa cifra sin reparar que justo hace un año votaron por Acción Nacional 9.5 millones y por el Revolucionario Institucional 5.7 millones en una Elección Presidencial.
Además, quieren comparar la participación de una elección federal con la del Poder Judicial, que es un ejercicio que se realiza por primera vez. Confunden la gimnasia con la magnesia.
Lo cierto es que con esta elección se sienta un precedente histórico: ahora, jueces, magistrados y ministros deben su cargo al pueblo, no a los acuerdos cupulares ni a designaciones políticas.
Ahora los focos rojos deben estar enfocados en las decisiones que tomen los jueces magistrados y ministros en funciones para que no liberen a más narcotraficantes, delincuentes de cuello blanco ni evasores fiscales, que fue el origen primigenio de la reforma al Poder Judicial que nos ocupa.