Ataque armado en Guanajuato evidencia desafíos de seguridad y vulnerabilidad de cuerpos de emergencia
Un ataque armado en la zona conocida como ‘Trébol de los Apaseos’ dejó ocho muertos, entre ellos dos bomberos y un paramédico, así como dos personas heridas, según informó la Fiscalía General del Estado de Guanajuato (FGE). Este hecho, ocurrido el sábado por la noche, vuelve a poner en el centro del debate la seguridad en una entidad marcada por la violencia relacionada con el crimen organizado.
Cuerpos de emergencia, víctimas de la violencia
Entre las víctimas fatales se encuentran dos miembros del Cuerpo de Bomberos de Apaseo el Grande y un paramédico del Sistema de Urgencias del Estado de Guanajuato (SUEG), quienes estaban en el lugar al momento del ataque. La pérdida de estos profesionales, dedicados a salvaguardar vidas, resalta la creciente vulnerabilidad de los cuerpos de emergencia frente a la violencia en el estado.
“Es inaceptable que quienes dedican su vida a proteger a otros sean alcanzados por esta ola de violencia. Su labor es fundamental y no podemos permitir que esto se normalice”, declaró una representante del gremio de bomberos de la región, quien pidió mayores garantías de seguridad para estos trabajadores.
Investigación en marcha
La Fiscalía estatal informó que ya se han identificado a seis de las ocho víctimas y que peritos y agentes de investigación criminal recabaron pruebas para esclarecer el caso. Sin embargo, hasta el momento no se ha detenido a los responsables.
La gobernadora de Guanajuato, Libia Denisse García, condenó los hechos y prometió justicia: “Un hecho así nos duele profundamente, pero no quedará impune. Hemos intensificado las investigaciones y la implementación de nuestra nueva estrategia de seguridad”.
Ataque armado en Guanajuato evidencia desafíos de seguridad y vulnerabilidad de cuerpos de emergencia
Una región bajo asedio del crimen organizado
Guanajuato ha sido uno de los estados más violentos de México desde 2018, con la mayoría de los homicidios vinculados al crimen organizado. Según cifras oficiales, entre enero y octubre de 2024 se registraron 2,119 homicidios dolosos, de los cuales el 84% involucraron armas de fuego.
Este ataque resalta la persistente inseguridad en el estado y la dificultad de contener la violencia en una región disputada por cárteles del narcotráfico.
Un llamado a la acción
Organizaciones civiles y sectores de la sociedad han pedido al gobierno estatal y federal redoblar esfuerzos para garantizar la seguridad en Guanajuato, no solo para los ciudadanos comunes, sino también para quienes forman parte de los cuerpos de emergencia.
“Es urgente proteger a quienes arriesgan su vida para salvar a otros. Este ataque no puede ser olvidado; debe marcar un punto de inflexión en las estrategias de seguridad”, señaló un portavoz de una ONG local.
Mientras tanto, el dolor y la indignación prevalecen en Apaseo el Grande, donde las familias de las víctimas exigen justicia y una respuesta contundente de las autoridades para evitar que tragedias como esta se repitan.
