Sheinbaum buscará posicionar agenda social y derechos humanos en foro del G7
En un contexto internacional marcado por tensiones migratorias, desafíos comerciales y la urgencia de una agenda climática común, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, emprende una intensa jornada diplomática durante la 51ª Cumbre del Grupo de los Siete (G7), donde no solo busca estrechar lazos con socios estratégicos, sino también visibilizar temas cruciales para América Latina como la defensa de los derechos humanos, la justicia climática y la inclusión social.
Con reuniones bilaterales agendadas para este martes con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el primer ministro de Canadá, Mark Carney, la mandataria mexicana llevará una postura firme en torno al respeto a las personas migrantes y la soberanía regional. En el encuentro con Trump –programado entre las 15:40 y 16:40 horas– Sheinbaum expondrá su rechazo a las recientes redadas antinmigrantes en territorio estadounidense, en una clara defensa del derecho al trato digno para miles de personas, muchas de ellas de origen mexicano y centroamericano.
Más tarde, a las 17:40 horas, dialogará con Carney sobre cooperación climática, comercio justo y las perspectivas rumbo a la revisión del T-MEC, prevista para iniciar en octubre de este año y culminar en 2026.
Además, Sheinbaum sostendrá un encuentro con el Consejo Empresarial de Canadá, a quienes buscará transmitir su visión de un México con crecimiento económico inclusivo, transiciones energéticas responsables y certeza jurídica para las inversiones con enfoque social.
Sheinbaum buscará posicionar agenda social y derechos humanos en foro del G7
La visita también contempla reuniones con representantes del Consejo y la Comisión Europea, así como encuentros bilaterales con los gobiernos de India y Alemania, con quienes México ha mantenido una agenda activa en cooperación científica y tecnológica, especialmente en temas de salud, medio ambiente y formación de talento joven.
La participación de Sheinbaum en la plenaria del G7 representa una oportunidad clave para proyectar la nueva etapa de política exterior mexicana, con un enfoque de diálogo multilateral, paz, desarrollo y combate a las desigualdades globales.
Está previsto que la mandataria regrese a la Ciudad de México la madrugada del miércoles, concluyendo así una gira estratégica que busca colocar al país como un interlocutor global propositivo y defensor de causas humanitarias.
