Sheinbaum asegura esfuerzos para restablecer la seguridad en Sinaloa ante protestas ciudadanas
Las marchas por la paz en Culiacán, que este fin de semana sumaron su segunda jornada consecutiva, reflejan la creciente exigencia de justicia y seguridad por parte de la ciudadanía. En este contexto, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, reiteró su compromiso con la población de Sinaloa, asegurando que el gobierno federal trabaja para garantizar la paz en el estado.
En respuesta a las demandas de renuncia del gobernador Rubén Rocha Moya, la mandataria recordó que su administración respeta la soberanía de los estados y las decisiones democráticas de los ciudadanos. “Ya se acabaron los tiempos en los que desde la Presidencia se ponía o quitaba gobernadores. Eso lo hace la gente con su voto”, declaró Sheinbaum, subrayando que su prioridad es fortalecer las estrategias de seguridad en colaboración con las autoridades estatales.
Refuerzos federales y cero impunidad
Sheinbaum destacó que se han enviado más elementos de seguridad federal a Sinaloa para reforzar las operaciones en la entidad. “Se está trabajando en la atención a las causas, la vigilancia, la presencia permanente y la cero impunidad”, afirmó. Asimismo, señaló que se busca garantizar justicia en casos emblemáticos como el asesinato de los hermanos Alexander y Gael Sarmiento Ruiz y su padre, Antonio Sarmiento Ruiz, tragedia que detonó las recientes manifestaciones.
La presidenta también adelantó que solicitará al gobierno de Estados Unidos información relacionada con la captura de Ismael “El Mayo” Zambada, un tema que, según dijo, no fue abordado con transparencia durante la administración de Joe Biden ni por el exembajador Ken Salazar.
Sheinbaum asegura esfuerzos para restablecer la seguridad en Sinaloa ante protestas ciudadanas
Ciudadanos exigen justicia y seguridad
El domingo, al menos mil habitantes de Culiacán participaron en una marcha por la paz, vestidos de blanco y portando globos y pancartas con mensajes como “¡Fuera Rocha!” y “¡Queremos paz!”. La protesta incluyó actos simbólicos, como la quema de una figura que representaba al gobernador Rocha Moya, reflejando el descontento por la percepción de inacción ante la creciente violencia en la región.
Esta manifestación dio continuidad a una protesta anterior, realizada el pasado 23 de enero, en la que cientos de personas ingresaron al Palacio de Gobierno exigiendo justicia inmediata por los asesinatos. En medio de la indignación, los ciudadanos han señalado que los enfrentamientos entre facciones del Cártel de Sinaloa, que recrudecieron en septiembre de 2024, han incrementado los índices de violencia, afectando gravemente a las comunidades locales.
La tensión entre la ciudadanía y el gobierno
El descontento social y las demandas de justicia ponen de relieve la complejidad de la situación en Sinaloa, donde la violencia ha escalado de manera alarmante. Mientras el gobierno federal refuerza su presencia en el estado, las protestas muestran la urgencia de resultados concretos que restauren la confianza ciudadana.
La administración de Claudia Sheinbaum enfrenta uno de sus mayores desafíos en materia de seguridad, al tiempo que busca equilibrar el respeto por la soberanía estatal con la necesidad de implementar estrategias efectivas para garantizar la paz en regiones afectadas por el crimen organizado.