Puebla conmemora su fundación proyectándose como ciudad del futuro
Puebla, Pue.— En el marco del 494 Aniversario de la Fundación de la Ciudad de Puebla, el gobernador Alejandro Armenta encabezó una ceremonia solemne en la que no solo se recordó el pasado glorioso de la capital poblana, sino que también se delineó una ruta clara hacia su transformación como modo de innovación, bienestar y civilización.
Acompañado por autoridades de todos los niveles de gobierno, representantes del sector empresarial, fuerzas armadas y el poder judicial, el mandatario estatal destacó que esta fecha histórica representa una oportunidad para repensar el papel de Puebla en el contexto nacional e internacional. “Puebla fue concebida como una ciudad modelo en el siglo XVI, y hoy tiene la oportunidad de serlo nuevamente, pero bajo una visión de progreso, tecnología y prosperidad compartida”, afirmó.
Alejandro Armenta remarcó que Puebla está preparada para asumir los retos contemporáneos gracias a su vocación histórica de transformación. “Somos el corazón de la patria. Siempre hemos defendido la soberanía y lo seguiremos haciendo, ahora desde una perspectiva de desarrollo sustentable y justicia social”, subrayó.
Puebla conmemora su fundación proyectándose como ciudad del futuro
En línea con la visión de transformación nacional impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum, el gobernador expresó su compromiso de consolidar un proyecto de estado que priorice la paz, la seguridad, la educación y el desarrollo económico con inclusión. “Puebla se está convirtiendo en un nodo estratégico, donde fuerzas armadas, instituciones de justicia y sector empresarial colaboran cada día para construir un futuro mejor”, apuntó.
Por su parte, el presidente municipal José Chedraui llamó a apostar por una ciudad sustentable e innovadora, destacando la importancia de trabajar de manera coordinada entre los distintos niveles de gobierno. “Seguiremos avanzando firmemente, construyendo una Puebla que mire al futuro con visión y responsabilidad”, señaló.
La ceremonia no solo fue un recordatorio del legado colonial y barroco de la ciudad, sino también una declaración de intenciones: convertir a Puebla en un referente de modernidad con raíces profundas en su historia, y con una ciudadanía activa en la construcción de un porvenir más justo, seguro y próspero.
