Persisten tensiones con la CNTE: Sheinbaum enfrenta primer reto sindical en vísperas del nuevo sexenio


La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) volvió a marcar distancia con el próximo gobierno federal, al rechazar de forma preliminar las propuestas presentadas durante una nueva mesa de negociación en la Secretaría de Gobernación (Segob), en la que participaron representantes del equipo de la presidenta electa Claudia Sheinbaum.
Luego de cinco horas de diálogo, en el que participaron figuras clave como Rosa Icela Rodríguez y Mario Delgado, los dirigentes sindicales señalaron que el gobierno no accedió a una de sus principales exigencias: la abrogación de la Ley del ISSSTE de 2007. En respuesta, la Coordinadora decidió someter a consulta con sus bases la nueva oferta oficial, que incluye medidas como el congelamiento de la edad de jubilación y su reducción gradual, la desaparición de la Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros (Usicamm), así como la instalación de comisiones tripartitas para revisar el actual régimen pensionario.
“Lo que proponen son paliativos”, acusó Yenny Pérez Martínez, secretaria general de la Sección 22 de Oaxaca, durante un mitin frente a la Torre del Caballito. La postura del magisterio disidente fue clara: no hay acuerdos definitivos hasta que la consulta interna con las bases determine los próximos pasos, incluida la posible continuidad del paro indefinido.
Aunque la presidenta electa ha insistido en mantener el diálogo abierto y ha señalado que se han logrado avances en materia de derechos laborales docentes tanto en su administración capitalina como durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, la CNTE mantiene un pliego de demandas que incluye un aumento salarial del 100%, la eliminación del sistema de Afores y la reinstalación de maestros cesados.
El movimiento también rechazó cualquier vinculación con partidos políticos y negó intenciones de interferir en los comicios relacionados con la reforma del Poder Judicial. “Nuestra lucha es por la abrogación de la ley del ISSSTE”, puntualizó Pérez Martínez.
El plantón instalado en el Zócalo capitalino y las movilizaciones estatales continuarán sin plazo definido, mientras el magisterio mantiene presión sobre el gobierno entrante. Dirigentes de la CNTE advirtieron que la resolución del conflicto requerirá una negociación directa con Claudia Sheinbaum, a quien demandan involucrarse personalmente en el proceso.
El caso representa uno de los primeros grandes desafíos de gobernabilidad para la próxima presidenta, quien deberá equilibrar la estabilidad institucional con las demandas sociales de uno de los sectores sindicales más combativos del país.