El incumplimiento de pago de Petróleos Mexicanos (PEMEX) a empresas proveedores y de servicios de Ciudad del Carmen, podría ser venganza política del director general de PEMEX, Octavio Romero Oropeza (ORO), porque no se le hizo ser candidato a gobierno del estado de Tabasco; pero también hace falta voluntad política de los legisladores federales y gobierno del estado de Campeche y municipio del Carmen, para presionar a la petrolera y pague el adeudo que tiene con las empresas, mencionó, Froilán Palestino Cruz, delegado estatal del Frente Nacional de Pueblos Indígenas y Comunidades Marginadas, de Campeche.

Indicó que el incumplimiento del pago a empresas lleva varios meses; PEMEX ha señalado que ha cubierto una parte del adeudo, sin embrago, en importante que la petrolera les cubra todo el pago a las empresas para que sobrevivan y se mantengan activas con el financiamiento que les debe PEMEX.

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“Creo que el director general de PEMEX, Octavio Romero Oropeza, a lo mejor está tomando una revancha política al municipio de Carmen, porque no se le hizo ser candidato a la gubernatura del estado de Tabasco, y no le interesa llevar a cabo la decisión que el presidente de la República tomó desde su inicio de gobierno, de traer la oficina de la dirección General de PEMEX a Ciudad del Carmen”, mencionó.

Decisiones nocivas para el estado de Campeche

Expresó que, además, las decisiones que toma Romero Oropeza, son nocivas para la economía del estado de Campeche y del municipio de Carmen, a pesar que en el Golfo de México, Sonda de Campeche, se realiza la extracción del mayor porcentaje de hidrocarburos.

No solo las agrupaciones empresariales deben exigir a PEMEX que pague la deuda a las empresas locales, también se deben unir los diputados federales, los senadores, el gobierno del estado y el presidente municipal, si les interesa la reactivación económica del municipio de Carmen y el estado de Campeche.

Mas de desinterés de los gobiernos del estado y municipal para exigir a PEMEX que pague la deuda a las empresas proveedoras y de servicios, hace falta voluntad política.