Miles de mujeres marchan en la capital para denunciar la violencia feminicida
Este martes, miles de mujeres volvieron a ocupar las calles de Ciudad de México con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. La protesta, cargada de consignas y mantas, buscó visibilizar la urgencia de frenar la violencia feminicida, que en México cobra la vida de alrededor de diez mujeres al día, así como exigir justicia para sobrevivientes, desaparecidas y víctimas de agresiones machistas.
Demandas centrales del movimiento
Entre las exigencias expresadas, destacaron el fin de la criminalización de la protesta feminista, el cese de ataques contra madres buscadoras, defensoras y activistas, además de la garantía plena de acceso al aborto legal y seguro.
“¡No llegamos todas!”, coreaban las manifestantes, en referencia a la frase “Llegamos todas”, utilizada por la presidenta Claudia Sheinbaum como lema de gobierno. Esta es la segunda marcha del 25N que se realiza bajo su administración, iniciada poco más de un año atrás.
Madres y sobrevivientes lideran la protesta
A la cabeza del contingente marchó Araceli Osorio, madre de Lesvy Berlín Rivera, asesinada en 2017 dentro de Ciudad Universitaria, en un caso que inicialmente fue mal clasificado como suicidio. Junto a ella avanzaron otras madres de víctimas de feminicidio, buscadoras de desaparecidas y mujeres sobrevivientes de ataques violentos.
Una de ellas fue Yeritza Bautista, quien sobrevivió a dos intentos de feminicidio en 2020. Bautista participó acompañada de la nueva Red Nacional de Sobrevivientes de Feminicidio (Renase), organización que impulsa reformas legales para endurecer las penas por este delito, actualmente de 11 años de prisión, apenas por encima de la sanción por violencia familiar.

Un problema que no se dimensiona
En México, solo una cuarta parte de los asesinatos de mujeres son investigados como feminicidios. En cuanto a tentativas, no existen cifras oficiales, lo que, según Bautista, permite que muchos ataques se clasifiquen como lesiones, violencia intrafamiliar o intentos de homicidio, impidiendo dimensionar la crisis.
Cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública indican que entre enero y octubre de 2025 se registraron 67,785 denuncias por lesiones dolosas y 226,711 por violencia intrafamiliar, además de 449,208 llamadas de emergencia relacionadas con este tipo de agresiones.
Llamado al Gobierno y crítica al “feminismo institucional”
Bautista exhortó a la administración de Sheinbaum a no reducir la lucha feminista a discursos políticos y recordó que el problema trasciende a cualquier gobierno. “Es un sistema entero que obstaculiza la justicia y no garantiza la no repetición”, señaló.
También lamentó que la participación en estas marchas haya disminuido. Se estima que unas 2,000 mujeres asistieron al 25N, cifra que atribuyó, en parte, al avance del llamado “feminismo institucional”.
La ruta de la marcha
Convocada por la coordinación 8M-CDMX, la manifestación inició alrededor de las 15:30 horas en la Glorieta de las Mujeres que Luchan, para avanzar por Paseo de la Reforma rumbo al Zócalo capitalino. Antes del arranque formal, algunos grupos decidieron marchar de manera independiente desde el mismo punto.
Entre estas mujeres se encontraba Martha García, de 65 años, quien viajó desde Los Ángeles para visibilizar la situación de las migrantes mexicanas en Estados Unidos. Aunque simpatiza con el actual gobierno, pidió a la presidenta Sheinbaum fortalecer la atención a las violencias de género a través de consulados con perspectiva de género.
