Joven crea robots que “comen” plástico para limpiar océanos y lagos
La Chispa trae noticias tecnológicas sobre un fenómeno innovador: un joven crea robots que “comen” plástico para limpiar cuerpos de agua. A los 16 años, Boyan Slat presenció algo que cambió su vida: más plástico que peces en el mar. Desde entonces, su obsesión por limpiar los océanos lo llevó a desafiar al mundo entero. Hoy, sus máquinas devoran basura a gran escala, marcando un antes y un después en la lucha ambiental global.
El origen de una misión ambiental
Todo comenzó en 2011, cuando Boyan Slat, un joven neerlandés, fue a bucear durante unas vacaciones en Grecia. Lo que debería haber sido una experiencia submarina fantástica se convirtió en una pesadilla: en lugar de peces, vio plástico. Ese impacto emocional lo llevó a hacerse una pregunta simple pero poderosa: “¿Por qué no podemos simplemente limpiar esto?”.
A los 18 años, decidió abandonar la universidad con apenas 300 euros y una idea ambiciosa: eliminar el 90% del plástico oceánico para 2040. Mientras otros lo consideraban un loco soñador, él comenzó a diseñar sistemas que literalmente “comen” basura marina.

Jenny y The Interceptor: robots que transforman océanos
En 2018, Boyan Slat presentó Jenny, el Sistema 002, que extrajo 100.000 kilos de plástico de la Gran Mancha de Basura del Pacífico. Era la primera vez que una solución tecnológica demostraba ser viable a gran escala. Sin embargo, Boyan no se detuvo allí: sabía que más del 80% del plástico oceánico proviene de solo 1.000 ríos.
The Interceptor: limpieza fluvial inteligente
Así nació The Interceptor, un robot catamarán completamente automatizado y alimentado por energía solar. Este sistema se instala en ríos altamente contaminados y recoge hasta 50.000 kg de residuos al día, antes de que lleguen al mar. Su eficiencia ha permitido patrullar los cauces más críticos del mundo, logrando resultados que superan cualquier intento previo.

Sistema 03: la máquina más grande
El Sistema 03 mide 2,5 km y es tres veces más grande que Jenny. Puede limpiar el equivalente a un campo de fútbol cada cinco segundos, e incluye una escotilla de seguridad para proteger la fauna marina. Este modelo no solo limpia, sino que establece un nuevo estándar global en tecnología ambiental. Aquí, nuevamente, el joven crea robots que “comen” plástico con una eficiencia sin precedentes.
Impacto global y legado
Hasta 2024, The Ocean Cleanup ha eliminado más de 11,5 millones de kilos de plástico, superando todos los esfuerzos anteriores. Sus robots no descansan: solo comen basura y lo hacen cada vez más rápido e inteligente. Boyan Slat demuestra que la voluntad puede más que los recursos. Una historia que inspira a millones a actuar y cambiar el mundo.
