Tailandia y Camboya reavivan una antigua disputa fronteriza con nuevos enfrentamientos armados

En medio de crecientes tensiones diplomáticas, La Chispa te informa sobre el conflicto entre Tailandia y Camboya, dos países vecinos del sudeste asiático que han reavivado una antigua disputa fronteriza con consecuencias armadas preocupantes.
El pasado jueves se registraron nuevos enfrentamientos armados, marcando un episodio más en esta compleja relación que lleva décadas sin resolverse del todo.
Nuevos enfrentamientos reavivan el conflicto entre Tailandia y Camboya
El jueves, zonas en disputa volvieron a convertirse en campos de batalla. El Ministerio de Defensa tailandés informó que los enfrentamientos continúan en al menos seis puntos a lo largo de la línea fronteriza.
Los ataques incluyeron intercambios de disparos, cohetes y bombardeos que dejaron al menos once civiles tailandeses muertos y otros 14 heridos. Como respuesta, Tailandia lanzó ataques aéreos sobre posiciones camboyanas.
Este repunte de violencia refleja un profundo trasfondo de desacuerdos históricos y rivalidades nacionalistas que han vuelto a poner en jaque la estabilidad regional. La zona crítica del templo de Ta Muen Thom, entre Surin y Oddar Meanchey, fue uno de los puntos más afectados.
Un conflicto con raíces centenarias
La tensión no es nueva. La disputa fronteriza se basa en desacuerdos sobre un mapa colonial francés de 1907 que marcó los límites entre ambos países. Mientras Camboya se basa en ese documento para respaldar sus reclamaciones territoriales, Tailandia cuestiona su precisión.
Uno de los puntos más conflictivos ha sido el templo de Preah Vihear, donde los enfrentamientos entre ambas fuerzas armadas han causado decenas de muertos y desplazado a miles desde principios del siglo XXI.
El conflicto de mayo: el punto de quiebre
El actual episodio bélico comenzó en mayo, cuando las fuerzas de Tailandia y Camboya intercambiaron disparos en una zona reclamada por ambos. En ese evento murió un soldado camboyano. Aunque los gobiernos afirmaron que se calmarían las aguas, las tensiones siguieron latentes.
Las medidas unilaterales empeoraron la situación. Tailandia cerró casi todos los cruces fronterizos, mientras que Camboya prohibió productos y medios tailandeses y desconectó enlaces eléctricos e Internet compartido.
La crisis política tailandesa agrava el escenario
El conflicto trascendió lo militar cuando se filtró una llamada entre la primera ministra tailandesa, Paetongtarn Shinawatra, y el exmandatario camboyano Hun Sen. En ella, lo llama “tío” y critica a su propio Ejército. Esto fue considerado una traición por la opinión pública y generó manifestaciones en Bangkok.
Como consecuencia, Paetongtarn fue suspendida y su coalición política sufrió la salida del partido Bhumjaithai. El exministro de Defensa, Phumtham Wechayachai, asumió como primer ministro interino para contener la crisis interna.
La Corte Internacional de Justicia ha sido clave en esta disputa. En 1962 otorgó la soberanía del templo de Preah Vihear a Camboya, decisión reafirmada en 2013. A pesar de esto, Tailandia ha rechazado la jurisdicción de la corte para futuros reclamos.
El actual gobierno camboyano, liderado por Hun Manet, ha continuado con la vía legal internacional, aunque el conflicto se mantiene activo en el terreno.
¿Qué viene para Tailandia y Camboya?
Ambos países deberán elegir entre escalar hacia un conflicto regional o comprometerse seriamente con una solución diplomática.
Las tensiones nacionalistas, la presión interna y la intervención internacional serán factores claves en el desarrollo de este enfrentamiento.
Por ahora, las medidas económicas y diplomáticas siguen endureciéndose, lo que podría derivar en una ruptura total si no se detiene a tiempo.
Tailandia y Camboya comparten más que una línea divisoria: un pasado conflictivo y un presente inestable. Las disputas fronterizas, alimentadas por errores históricos y tensiones políticas, siguen siendo una amenaza para la paz en el sudeste asiático.