EUA cierra centros de procesamiento migratorio ante histórica caída en cruces irregulares


Las autoridades migratorias de Estados Unidos han anunciado el cierre de cinco instalaciones temporales de procesamiento de migrantes en la frontera con México, ante un desplome sin precedentes en el número de detenciones diarias, que han bajado a unas 300 en promedio.
Los centros de Donna, North Eagle Pass y Laredo (Texas), así como los de Yuma y Tucson (Arizona), cesarán operaciones, mientras que los de San Diego (California) y El Paso (Texas) seguirán en funcionamiento, informó la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) en un comunicado.
El informe de la CBP reveló que en febrero de este año fueron detenidos 8,347 migrantes cruzando la frontera suroeste, lo que representa una caída del 94 % en comparación con el mismo mes del año anterior y una disminución del 71 % con respecto a enero. Esta reducción coincide con la implementación de nuevas medidas restrictivas impulsadas por el expresidente Donald Trump, quien retomó una línea de endurecimiento contra la migración irregular.
“El drástico descenso en la detención de inmigrantes ilegales como resultado del liderazgo del presidente Trump nos permite reducir el número de instalaciones temporales de procesamiento en puntos estratégicos a lo largo de la frontera suroeste”, declaró Pete Flores, comisionado interino de la CBP.
EUA cierra centros de procesamiento migratorio ante histórica caída en cruces irregulares
El funcionario destacó que las instalaciones ya no son necesarias debido a que los inmigrantes en situación irregular están siendo expulsados de manera más rápida y eficiente bajo las nuevas disposiciones migratorias.
El impacto de estas medidas se ha reflejado también en América Latina. En Panamá, el presidente José Raúl Mulino anunció el cierre paulatino de los centros migratorios en la provincia del Darién, que han operado desde 2016 para atender a los migrantes en su tránsito hacia el norte. Según Mulino, el flujo migratorio en esa región ha caído hasta un 98 % en el último año, pasando de 36,841 migrantes en marzo de 2024 a solo 112 en el mismo mes de 2025.
El panorama migratorio en el continente ha cambiado drásticamente en los últimos meses, con un endurecimiento de las políticas en Estados Unidos que ha generado un efecto disuasorio para quienes buscan cruzar la frontera de manera irregular. Sin embargo, organizaciones defensoras de derechos humanos han advertido sobre los riesgos de estas políticas para los migrantes que aún intentan llegar al país en busca de refugio o mejores condiciones de vida.