Corea del Sur repatriará a 300 trabajadores de Hyundai detenidos por el ICE en EE.UU.

Corea del Sur repatriará a 300 trabajadores de Hyundai detenidos en Estados Unidos luego de una operación de gran escala que ha generado conmoción internacional y preocupación política. Este caso ha puesto en el centro del debate las relaciones bilaterales entre Corea del Sur y EE.UU., además de la presión social sobre las políticas migratorias estadounidenses.
Corea del Sur repatriará a 300 trabajadores de Hyundai: la operación que sacudió a Georgia
Más de 300 trabajadores de Corea del Sur fueron detenidos tras una masiva redada de inmigración en una planta de Hyundai ubicada en Georgia, Estados Unidos. El gobierno surcoreano confirmó que todos serán liberados y trasladados a su país de origen mediante un avión chárter que se enviará en las próximas horas.
Kang Hoon-sik, jefe de despacho presidencial de Lee Jae Myung, explicó que las negociaciones entre Seúl y Washington concluyeron con éxito, permitiendo la repatriación inmediata de los trabajadores afectados.
Viaje urgente de Cho Hyun a Estados Unidos
El ministro de Relaciones Exteriores de Corea del Sur, Cho Hyun, viajó este lunes hacia Washington para sostener conversaciones con autoridades estadounidenses y garantizar la seguridad de los ciudadanos detenidos.
Cho también destacó que la magnitud del caso requiere coordinación directa al más alto nivel, ya que más de 475 personas fueron arrestadas, siendo la mayoría surcoreanos. Los afectados son trabajadores de Hyundai, que se encontraban en una planta en construcción junto con LG Energy Solution para producir baterías de vehículos eléctricos.
El operativo de ICE y la magnitud de la detención
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ejecutó un operativo a gran escala en Georgia, catalogado como uno de los más grandes en la historia del estado. Los agentes federales irrumpieron en la planta de Hyundai y obligaron a cientos de empleados a alinearse, ser cacheados y posteriormente esposados.
La mayoría de los detenidos fueron trasladados al centro de detención de inmigrantes en Folkston, Georgia, cerca de la frontera con Florida. Ninguno ha sido acusado formalmente de delitos, pero algunos fueron señalados por tener visas vencidas o haber ingresado de forma irregular al país.
Inversiones en riesgo y tensiones bilaterales
La redada sorprendió en Seúl, especialmente porque Corea del Sur es un aliado estratégico de Estados Unidos. En julio, ambos países habían firmado acuerdos millonarios: Seúl se comprometió a comprar 100 mil millones de dólares en energía estadounidense y a invertir 350 mil millones en territorio norteamericano.
El presidente Lee Jae Myung señaló que los derechos de los ciudadanos surcoreanos no deben ser vulnerados durante procedimientos de aplicación de la ley en EE.UU., enfatizando que este tipo de acciones pone en riesgo tanto la confianza como la estabilidad económica entre ambos países.