Harvard protege los colores más raros del mundo en una “biblioteca” especial
 
						 
			En esta ocasión La Chispa no trae una noticia como tal, pero sí una nota informativa de algo poco conocido: Harvard protege los colores más raros del mundo. Esta universidad posee una colección única con pigmentos imposibles de recrear. Esta historia no solo es fascinante, también es un viaje a través del tiempo y el arte.
Una de las colecciones más extrañas del planeta
Dentro de los Museos de Arte de Harvard, se encuentra la Forbes Pigment Collection, una bóveda que almacena más de 2,500 pigmentos diferentes. Lo curioso es que muchos de ellos provienen de fuentes completamente inusuales: insectos extintos, piedras preciosas pulverizadas, minerales ultra-raros y hasta restos de momias reales. Sí, leíste bien.
¿Por qué Harvard protege los colores más raros?
El motivo va mucho más allá del simple coleccionismo. Esta colección sirve como una herramienta crucial para investigadores, restauradores y científicos del arte. Gracias a estos pigmentos, es posible autenticar pinturas, detectar falsificaciones y entender cómo se creaban obras maestras hace siglos.

Además, algunos de estos colores simplemente no pueden ser replicados con tecnología moderna. Su valor va más allá de lo visual; representan conocimientos perdidos y técnicas irrepetibles. Harvard protege los colores más raros porque son una parte irremplazable del patrimonio artístico global.
Pigmentos con historias tan intensas como sus tonos
Uno de los colores más comentados es el “Mummy Brown”, elaborado antiguamente a partir de cuerpos momificados. Otro es el “Lapis Lazuli Blue”, extraído de una piedra más cara que el oro durante siglos. Incluso existe un pigmento hecho con caparazones de escarabajos. Cada frasco en esta bóveda encierra una historia digna de un documental.
¿Sabías que algunos artistas aún buscan estos pigmentos?
Sí, aunque no los pueden usar todos por razones éticas o de conservación, algunos artistas contemporáneos están obsesionados con los pigmentos del pasado. La influencia de esta colección incluso llega al diseño moderno, al análisis químico forense y a la conservación de monumentos históricos.
 
		
