8M| Películas mexicanas que no te puedes perder en camino al 8M


La Chispa te presenta una selección de impactantes películas mexicanas feministas o que rescatan temas sociales relevantes que han marcado la cinematografía nacional con historias conmovedoras y necesarias. Estas producciones abordan problemáticas sociales desde la mirada de las mujeres, denunciando injusticias y visibilizando luchas que aún continúan vigentes. Si buscas cine con perspectiva de género, estas películas son imperdibles.
El impacto del cine feminista en la narrativa social
Las películas mexicanas feministas han logrado generar conversación y conciencia sobre la desigualdad de género, la violencia y la lucha por los derechos de las mujeres. A través de relatos basados en hechos reales o ficciones inspiradas en la realidad, estas historias evidencian la urgencia de cambios estructurales en nuestra sociedad.
Sin señas particulares: Una historia de búsqueda y resistencia
Sin señas particulares es una película que narra la travesía de una madre en la búsqueda de su hijo desaparecido. Esta película retrata la violencia que afecta a miles de familias mexicanas, especialmente a las mujeres, quienes muchas veces quedan atrapadas en una lucha incansable por la verdad y la justicia. La protagonista es Magdalena, la madre que lleva meses sin saber de su hijo desde que se fue del pueblo para atravesar la frontera con Estados Unidos y que, negando la versión de los oficiales, decide buscarlo por los límites fronterizos. A partir de ese episodio, la trama presenta única y exclusivamente a la madre que, como una detective, espera dar con el paradero del hijo desaparecido por la zona fronteriza de México, donde también dialoga con las autoridades que ignoran el problema, transita por lugares peligrosos controlados por el narcotráfico, y, en última instancia, establece un vínculo maternofilial con un joven deportado que le recuerda a su hijo.
Noche de fuego
Noche de fuego expone la cruda realidad de las niñas que crecen en comunidades marcadas por la violencia del crimen organizado. La historia sigue a Ana, una niña que vive en la Sierra Mexicana junto a su madre, mientras su comunidad es azotada por la violencia y el miedo. Con desapariciones, cuotas de piso y profesores que abandonan su labor por temor, la infancia de Ana y sus amigas se desarrolla en un entorno de incertidumbre. La directora Tatiana Huezo logra una narración conmovedora basada en una profunda investigación, adentrándose en la dinámica de la comunidad y en la amistad entre las niñas, quienes saben que están en peligro y que deben permanecer unidas para sobrevivir.
Ruido
Ruido es una película que denuncia la crisis de desapariciones en México a través de la historia de una madre que busca desesperadamente a su hija. Su protagonista, Julia, se adentra en un camino de dolor y resistencia, mostrando la sororidad y la lucha colectiva como herramientas fundamentales para enfrentar la injusticia. En un contexto de guerra de narcotráfico y trata de mujeres, la historia de Julia y su hija Ger se entremezcla con las historias reales de otras personas desaparecidas. Así como la existencia real de la Asociación Voz y Dignidad por los Nuestros, con Edith Pérez Rodríguez a la cabeza, quien también aparece en el filme de Natalia Beristáin. Mientras la policía y el gobierno miran hacia otro lado, este sistema corrupto refleja una sociedad profundamente marcada por el machismo y la impunidad.
Las 3 muertes de Marisela Escobedo
Este documental dirigido por Carlos Pérez Osorio y coproducido por VICE Studios y Scopio, revela la impunidad y corrupción en el sistema judicial mexicano. Narra la lucha de Marisela Escobedo tras el feminicidio de su hija Rubí, quien fue asesinada y calcinada en Ciudad Juárez en 2008. A pesar de que el responsable confesó el crimen, fue liberado. Esto llevó a Marisela a una incansable búsqueda de justicia hasta su propio asesinato en 2010. La investigación periodística de Karla Casillas expone la negligencia de las autoridades y la conexión entre el crimen organizado y el gobierno, convirtiéndolo en un testimonio impactante de resistencia y denuncia.
Marisela deseaba que la desaparición de Ingrid fuera la última en Ciudad Juárez, no fue así.
Abrir una herida para no cerrar una conversación.
El cine es una herramienta poderosa de denuncia y transformación social. A través de estas películas mexicanas feministas, el público puede reflexionar sobre problemáticas que atraviesan a millones de mujeres y comprender la importancia de seguir luchando por la igualdad y la justicia. Porque abrir una herida no es solo recordar el dolor, sino mantener viva la conversación. Solo así, el cine se convierte en un espacio de resistencia, memoria y cambio.