Emiratos Árabes Unidos retirará sus fuerzas en Yemen
La Chispa trae noticias globales para quienes desean entender qué pasa en el mundo. Emiratos Árabes Unidos retirará sus fuerzas en Yemen tras un episodio que reconfigura alianzas y eleva tensiones en Medio Oriente, luego de ataques saudíes en Mukalla y acusaciones cruzadas entre Riad y Abu Dabi. Este movimiento, anunciado como voluntario, ocurre en un contexto de escalada diplomática y militar que impacta la estabilidad regional y la guerra yemení.
Contexto del conflicto y acusaciones cruzadas
Arabia Saudita acusó a Emiratos Árabes Unidos de acciones “altamente peligrosas” que amenazan su seguridad nacional, señalando presuntos envíos de armas a fuerzas separatistas. En respuesta, Riad realizó ataques aéreos “limitados” y pidió la salida de tropas emiratíes en 24 horas. Aunque Abu Dabi rechazó inicialmente las acusaciones, Emiratos Árabes Unidos retirará sus fuerzas en Yemen “a la luz de los acontecimientos recientes”, enfatizando la seguridad de su personal.
El papel del STC y la fragmentación del frente
El Consejo de Transición del Sur (STC), respaldado por EAU, avanzó en provincias clave, lo que —según el gobierno yemení apoyado por Arabia Saudita— fragmentó el frente contra los hutíes. Este avance incluyó movimientos hacia Hadramaut, región rica en petróleo, intensificando la disputa territorial y política.
Reacciones regionales y diplomacia internacional
Estados Unidos llamó a la moderación y a la diplomacia, destacando la necesidad de una solución duradera. El episodio marca una escalada entre dos aliados históricos y socios energéticos clave de Washington. En este contexto, Emiratos Árabes Unidos retirará sus fuerzas en Yemen como gesto para desescalar, mientras se evalúan canales diplomáticos.
Impacto humanitario y antecedentes
Yemen enfrenta una de las peores crisis humanitarias del mundo tras más de una década de guerra. La retirada emiratí revive precedentes de 2019 y subraya el costo humano del conflicto, con economías locales devastadas y servicios sociales colapsados. Además, la relación saudí-emiratí, aunque sólida en energía y seguridad, atraviesa tensiones que podrían redefinir equilibrios regionales.
La salida de unidades “antiterroristas” plantea interrogantes sobre el control territorial, la coordinación contra grupos armados y el futuro del proceso político yemení.
