Mariana, la esposa quiere Monterrey
Por Arturo Ríos
El caciquismo se define así: “Influencia o dominio excesivo del cacique en la vida política y social de una comunidad. “toda la corrupción y los vicios del caciquismo: compra de votos, coacciones, falseamiento de resultados electorales estaban fuertemente arraigados en la comarca”.
A partir de la expansión de los virreinatos en América, el término fue empleado por los conquistadores para designar a las autoridades políticas indígenas, sin atender a la diversidad de los sistemas políticos originarios de América ni a las nomenclaturas autóctonas.
Es decir, el caciquismo, nace después de saborear el poder y así, se ha extendido a lo largo de la historia a través del logro del mandato en Democracia y es la manifestación de la ambición. Se obsesionan con mandato.
Los ejemplos del pasado, son más que abundantes y ahora lo palpamos en el estado de Nuevo León con los esposos García, después del osote de Samuel; intentó todo por ser el esquirol de Andrés Manuel en el 2024 con el partido de Dante y los dejó trastocados en la desesperación.
Salta una pregunta: ¿Quién es el cacique neolonés? Mariana, la esposa? o, Samuel, que sigue como gobernador. Pues Ella, es la mandamás, con su carácter de Influencer, llevó al marido a la Silla gubernamental. Él fue su marioneta nada más, que quiso volar.
Mariana Rodríguez Cantú, ahora se lanza a la Alcaldía de Monterrey. Que podría lograr, es una maestra dominante en las redes sociales, las imperiosas de la opinión general hoy en los días, en las que se concentra toda la opinión.
Los regios, estarían gobernados a través de las redes sociales “mareados” en sus celulares y computadoras en una modalidad que cambió las vidas de alcance mundial.
Monterrey y Toluca, se disputan la supremacía en el tamaño de la riqueza como entidades y la pelean y en el caso de la entidad del norte, no está tan mal:
Pero en Monterrey deambulan unas 10 mil personas indigentes; fantasmas urbanos que nadie quiere ver, pero ahí están, de las cuales unas 800 pernoctan en el área metropolitana, y que la indigencia se ha duplicado en las dos últimas décadas.
¿Le importarán a Mariana este tipo de problemas de urgente solución? ¿O se mantendrá en su afición de la publicidad que es lo más que domina, sin conocer su sensibilidad? Es el enigma que se sabría una vez en el poder.
La vanidad de la pareja neolonesa ha sido palpable a lo largo de la accidentada gestión del muchacho que se quiso elevar y, que sus ambiciones los echaron a perder, ahora la dama, desea ingresar a las filas de gobernar sin la experiencia del significado que conlleva semejante responsabilidad.
Los regios están en problemas de decisión; el razonamiento del voto debe de imperar; la probaron con Samuel y ya se sabe cómo les fue.
