La guerra contra la justicia
Por: Vladimir Galeana Solórzano
Sin lugar a dudas se le hace tarde a Andrés Manuel López Obrador convertirse en un sicario de la política. Y un sicario no es otra cosa que un asesino a sueldo, y eso es en los que se ha convertido Andrés Manuel López Obrador desde que tomó la decisión de apropiarse de los recursos de los miembros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, quienes azorados observaron la forma en que el Presidente de la Republica les robó sus fondos de jubilación.
Pero ese lamentable y vergonzoso recurso que utilizó el Presidente de la Republica lo pinta como el verdadero tirano en que se ha convertido, ante la circunstancia de que ha sido uno de los mandatarios más empoderados de la historia, a la vez que el más voraz para disponer de los recursos públicos como si fueran de su propiedad. Pero ahí estarán las leyes y los mexicanos esperando la oportunidad de cobrarle las afrentas.
Bien dicen por ahí que no hay plazo que no se cumpla, y al final los mexicanos tendremos la satisfacción de observar la manera en que el juicio de la historia coloque a Andres Manuel Lopez Obrador en en sitial que le corresponde, y que no es otro más que los de Tirano, Sátrapa, Ladrón, Asesino, y sobre todo, el peor individuo que haya alcanzado el honor de ser Presidente de la República.
Andres Manuel López Obrador ha emprendido una guerra contra los integrantes del Poder Judicial de la Federación, porque el dinero que ahora se ha robado, ha sido producto de las cuotas de quienes decidieron aportarlas para tener y mantener la oportunidad de contar con recursos para una jubilación que les permita solidez monetaria en la vejez.
El Presidente de la Republica enseñó el rostro de la venganza ante la serie de decisiones del poder judicial que hasta ahora no se ha doblegado como lo han hecho vergonzosamente los presuntos diputados y senadores que hasta ahora han declinado de su papel de ser contrapesos del Poder Presidencial. Y esa circunstancia los marcará indefectiblemente en los libros de la historia de este gran país.
Si los Ministros de la Corte se quedan sin hacer su trabajo, que no es otro que la aplicación estricta de las leyes, dejaran en estado de indefensión a los mexicanos que podrían ser avasallados por las ansias tiránicas de quien por ahora detenta el poder presidencial. México es más grande que cualquier gobernante con ínfulas de tirano, y lo hemos constatado en nuestro devenir histórico. Al tiempo. [email protected]
Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con cincuenta años de experiencia en diversos medios de comunicación.