El comportamiento animal

Por: Vladimir Galeana Solorzano

Cuando los seres humanos deciden realizar un acto de maltrato animal debiera ser castigado como un delito grave, porque esos animales al igual que nosotros, cuando son animales de compañía, como se les denomina en estos tiempos, no tiene porque ser culpados de lo que no hacen, o bien de aquello que nos les enseñaron a saber, que no se puede hacer algo que para ellos está prohibido.

Lo más grave de todo esto, es que esa presunta superioridad del género humano en ocasiones llega hasta el extremo de martirizar a los animales de casa, o de otro tipo de género, simplemente por esa maldita superioridad que se dice tener en nuestro genero. Pero al fin y al cabo todos somos animales, porque el género humano está clasificado en esa lista, y unos son más animales que otros.

Sin lugar a dudas el humano está en la absoluta decadencia. Y no se trata de epitetar a ciertos grupos sociales, porque ellos mismos se encargan de hacerlo al buscar en los tiempos que vivimos, un dejo de superioridad en el mundo de las clases sociales donde se sigue pensando que la condición de vida es distinta, y piensan que eso es simplemente porque unos son más hábiles que otros, sin llegar a valorar la condiciones de cada cual y mucho menos el esfuerzo.

En el desarrollo del género humano todos hemos tenido las mismas oportunidades en las diferentes formas de desarrollar esas habilidades que nos resultan fundamentales cuando de avanzar socialmente se trata, y que no es otra cosa que la reñida competencia en los mercados laborales, la preparación, pero sobre todo, la generosidad de compartir con camaradería esas habilidades que podrían detonar mejores formas de vida para todos.

El problema es la mendicidad que cada quien tiene por doctrina personal, y no me cabe la menor duda de que si alguien tiene como sello esa mendicidad personal a la que me he referido, es sin duda el Presidente de la Republica, Andrés Manuel López Obrador, que todo el tiempo pontifica e intenta culpar a sus presuntos adversarios del desastre de gobierno que ha venido ejerciendo en los últimos cinco años.

Andrés Manuel López Obrador es el peor de todos los animales, porque si lo hemos denominado un hombre que ha sido sobredotado y no aprovecha esa circunstancia para hacer las cosas bien, y aparte de ello culpabiliza a los demás de sus yerros, porque en todos observa enemigos, tendrá que pasar a la historia en el mismo sitial de Victoriano Huerta, a quien apodaron “El Chacal” por su decisión de victimar a quien consideraba sus enemigos, el tabasqueño también lo está haciendo. Pero lo hizo con los niños que la decían cáncer, y con aquellos que necesitaban los medicamentos en los hospitales públicos. Para decirlo más claro, “El Chacal” o sea Victoriano Huerta, mato a muchos menos hombres y mujeres de los que ha matado Andrés Manuel López Obrador. Aquel los mató con balas, este los ha matado negándoles los medicamentos, sobre todo a los niños. Mendigo asesino. Al tiempo. [email protected]

Lic. en Derecho por la UNAM. Lic. En Periodismo por la Carlos Septien. Conferencista. Experto en Procesos de Comunicación. Expresidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión, Miembro del Consejo Nacional de Honor ANPERT, con cincuenta años de experiencia en diversos medios de comunicación.