De libros y películas
Un buen vino es como una buena película: dura un instante y te deja en la boca un sabor a gloria; es nuevo en cada sorbo y, como ocurre con las películas, nace y renace en cada saboreador. Camelot.
Días que termina el mes de enero. Año electoral, donde se va a librar la madre de todas las batallas, volver al neoliberalismo, dicen desde el poder, o alcanzar un poco al comunismo, dicen los opositores. La baraja está en los tapetes, serán los electores los que decidan a qué país le vamos a apostar. Mientras eso ocurre, hay días en que es mejor sumergirse en los libros y las películas. En libros traigo tres a la mano que leo con acuciosidad. Un amigo me recomendó 8 días de Mayo. Descubro que ya lo había leído hace algunos años, pero esta vez lo pedí a Mercado Libre y me llegó a los tres días. Voy a la sinopsis. “30 de abril de 1945. En un búnker en las profundidades de la cancillería del Tercer Reich, Adolf Hitler y Eva Braun se suicidan. Pero la Alemania nazi sobrevive, la guerra no ha terminado. Todo parece detenerse y, sin embargo, todo se mueve a un ritmo frenético. Volker Ullrich relata jornada a jornada este tiempo fuera del tiempo y adentra al lector en un mundo que se derrumba, lleno de drama, violencia, esperanza y miedo. Los siguientes ocho días, entre los más turbulentos de la historia, fueron testigo de las batallas finales de la Segunda Guerra Mundial y el colapso de la Wehrmacht, pero también de las últimas marchas de la muerte, de una epidemia de suicidios y violaciones masivas, de los intentos fanáticos de una última resistencia, de la desesperada huida de los peces gordos nazis, de la liberación de los campos de concentración”. Y las terribles violaciones de esos bárbaros comunistas, que, tenía razón el general Patton, cuando le pedía al comandante en jefe, el general Eisenhower, mientras estaba al pie de Berlín, que lo dejara entrar para combatir a los rojos comunistas, que esos eran los verdaderos enemigos, no los alemanes. Eisenhower no lo dejó continuar y se vinieron años inciertos de la Guerra Fría, donde el mundo descubrió que los comunistas eran los principales enemigos de las democracias, hasta el día de hoy con el sanguinario Vladimir Putin. Interesante.
Oppenheimer prometo americano
El otro es Oppenheimer, que está en Roku y también en el libro que escribieron un ganador del Pulitzer, esos grandes periodistas del New York Times, que son esplendidos en su narrativa. ‘El 16 de julio de 1945, en el desierto de Nuevo México, se detonaba en secreto la primera bomba atómica. Impactado por el poder destructivo de su creación, J. Robert Oppenheimer, director del Proyecto Manhattan, se comprometería desde entonces a luchar contra el desarrollo de la bomba de hidrógeno y contra la guerra nuclear. Sospechoso de comunista para los Estados Unidos de la era McCarthy, fue perseguido por el FBI, calumniado como espía de la Unión Soviética y obligado a dimitir de cualquier función pública. Su vida privada fue arrastrada del mismo modo hacia el esperpento; su casa fue allanada con micrófonos ocultos, y su teléfono, intervenido. No sería hasta 1963 que el presidente Kennedy lo rehabilitaría y, con ello, su figura obtendría otro cariz para los ciudadanos del mundo entero. Treinta años de entrevistas a familiares, amigos y colegas; de búsqueda en archivos del FBI; de análisis de las cintas con discursos e interrogatorios, y de hallazgos de documentos privados del físico nuclear dieron como resultado este monumental libro. Una biografía de una enorme minuciosidad que ofrece una visión íntima del científico más famoso de su generación; una de las figuras icónicas del siglo XX para quien el triunfo y la tragedia se unieron en un nudo gordiano’.
Pocas veces un libro y una película resultan extraordinarios, es este el caso de Oppenheimer, la película va directo al Oscar y los libros se venden como pan caliente.