Ernestina Godoy rechaza ratificación a cambio de impunidad para líderes políticos
La fiscal general de Justicia de la Ciudad de México, Ernestina Godoy Ramos, enfrentó su no ratificación en el cargo y desestimó este hecho como una derrota, subrayando su decisión de no ceder ante presiones para liberar a políticos del PRI y el PAN implicados en casos de corrupción inmobiliaria y explotación sexual.
Durante su último informe de labores, Godoy afirmó que su negativa a negociar la ley y liberar a los mencionados líderes políticos fue la razón por la que no logró extender su mandato por cuatro años. “No negociamos la ley ni cedimos a presiones de liberar a líderes del PRI y el PAN detenidos por explotación sexual de mujeres y con delitos relacionados con la corrupción inmobiliaria a cambio de su voto”, aseveró.
La fiscal enfatizó que priorizó la justicia sobre la continuidad en el cargo, rechazando cualquier intento de utilizar su posición para favorecer a quienes utilizaron la función pública para perjudicar a los ciudadanos. Apuntó que el bloqueo de su ratificación provino de una minoría de legisladores del PRI y del PAN, argumentando que su unión se basó en complicidades para protegerse a sí mismos, ignorando el sufrimiento de las víctimas y apoyando a los victimarios.
Godoy señaló que esta minoría defiende la corrupción como un derecho político, convirtiéndola en su ideología y propuesta política. Destacó que la procuración de justicia es un asunto de gran trascendencia social, dejando en claro quiénes están del lado de la justicia y quiénes defienden la impunidad como privilegio para la clase política.
La fiscal reconoció el respaldo de la mayoría del Congreso de la Ciudad de México, destacando que el 62 por ciento de sus integrantes se alinearon con la justicia. Afirmó haberse sometido al proceso de ratificación a pesar de saber que enfrentaba un veto por parte de aquellos que habían perdido el privilegio de la protección política.
Finalmente, Ernestina Godoy reafirmó su compromiso con la justicia y la transparencia en un contexto político donde denuncia la defensa de la impunidad como una herramienta de la clase política, resaltando la importancia de mantener la independencia y la integridad en la administración de la justicia en la Ciudad de México.
