Carlos III ‘borra’ a su hermano Andrés y le retira últimos honores reales
La Chispa trae noticias del mundo pues se reportó que Carlos III ‘borra’ a su hermano Andrés y le retira últimos honores reales. La decisión, vista como una de las más drásticas en la historia reciente de la Corona británica, ha dejado al príncipe Andrés prácticamente sin vínculos oficiales con la familia real. Este movimiento ha reabierto el debate sobre la crisis interna en Buckingham y las consecuencias políticas de la caída del exduque de York.
El despojo definitivo de honores reales
El rey Carlos III ha retirado esta semana los últimos honores reales a su hermano Andrés Mountbatten-Windsor, quien ha sido despojado de todos sus títulos y se encuentra en plena negociación para su traslado fuera de Royal Lodge.
Según la London Gazette, el comunicado oficial fechado el 1 de diciembre anula su nombramiento como Caballero Compañero de la Muy Noble Orden de la Jarretera y elimina también su estatus como Caballero Gran Cruz de la Real Orden Victoriana.

La caída de Andrés: un precedente para la monarquía
Tras años de escándalos, este nuevo golpe marca un antes y un después. Carlos III ‘borra’ a su hermano Andrés y le retira últimos honores reales no solo como castigo, sino como estrategia para proteger la institución. El caso Epstein, la demanda de Virginia Giuffre y la fallida entrevista en la BBC siguen siendo sombras que la Corona no puede permitirse ignorar.
Desde 2019 Andrés permanece fuera de la vida pública, y desde 2022 sin títulos militares. La presión mediática y política ha sido determinante en esta caída sin precedente.

El conflicto por Royal Lodge y la negociación en Sandringham
El proceso incluye además la exigencia de abandonar Royal Lodge, una mansión de treinta habitaciones. Aunque Andrés había invertido casi diez millones de euros, la Corona busca su salida voluntaria. Negocia ahora una vivienda en Sandringham, donde exige una casa amplia y personal completo, lo que ha generado nuevas tensiones internas.
Según fuentes citadas por la prensa británica, el príncipe no supera la pérdida de estatus y continúa pidiendo ser tratado con sus títulos, aunque solo conserva el de vicealmirante y hay presiones para retirarlo también.
