A mitad del camino
Sin Remitente
Víctor Ulín
Si bien el inicio de su administración fue un tanto incierto, la alcaldesa de Centro, Yolanda Osuna Huerta, logró reorientar su gobierno a niveles de satisfacción que hoy los tabasqueños la ponen en las encuestas de preferencia como un activo para ser candidata a la gubernatura.
Lo que está sucediendo no es fortuito. Hay hechos que lo documentan. Que ofrecen la explicación al buen ánimo de los citadinos respecto a lo que hace su gobierno y alcaldesa.
La atención y solución a los problemas más sentidos, entre los que destacan la eficiencia en los servicios públicos y la atención al problema de los baches de las calles y la construcción de nuevas en colonias populares y zona rural, amén de otras acciones, es algo que la misma población constata todos los días y que sabe reconocer.
Apenas la semana pasada, la alcaldesa anunció que en el siguiente cuatrimestre su administración invertirá 413 millones 821 mil 617.78 pesos para obras de vialidad, agua y saneamiento, alumbrado público y equipamiento tanto en la zona rural como en la urbana, a fin de abatir rezagos y avanzar en la transformación de los servicios públicos municipales en beneficio de sus habitantes.
No se equivoca la alcaldesa cuando sostiene que su gobierno pasó de los compromisos a los hechos, porque es eso mismo lo que hoy la tiene en el ánimo de la población que contesta en las encuestas, como en la más reciente del diario Presente, que sí la quiere como candidata a gobernadora en la elección del 2024.
La ex secretaria de Cultura ha demostrado que puede trabajar y ofrecer resultados tangibles en un municipio como el de Centro que ciertamente mantiene un rezago histórico en la atención a problemas urbanos que poco a poco van resolviendo.
En esta mitad del camino en su período de gobierno, hay que reconocer que la alcaldesa ha madurado política y administrativamente hablando, como se refleja en la certidumbre que sus políticas públicas le dan a la población de que seguirán mejorando sus vidas, sus colonias y comunidades.
Es evidente que la dinámica del gobierno municipal en general y de la alcaldesa en lo particular es otra. La alcaldesa no solo inaugura el inicio de las obras o da los anuncios, sino que, como es lo correcto, supervisa que se ejecuten correctamente en tiempo y forma, así sea en días de sol, lluvia o entre lodo o arena, lo que evita atrasos o desatención de sus funcionarios que tienen que cumplir y servir a la gente.
A la mitad del camino, el saldo del gobierno municipal es favorable y los habitantes de Centro esperarían que se continuara en la misma ruta de progreso. Por lo pronto, las encuestas que ahora ubican a la alcaldesa entre las aspirantes más aceptadas y competitivas para ser candidata al gobierno por Morena, son de alguna manera también una evaluación a su buen desempeño.
