México y EUA buscan cerrar acuerdo hídrico en quinta reunión binacional del año
En un contexto de creciente presión sobre los recursos hídricos compartidos, México y Estados Unidos sostendrán este martes la quinta reunión binacional del año para evaluar el cumplimiento en la entrega de agua y revisar los avances técnicos en torno al Tratado de Aguas de 1944, un instrumento clave para la relación bilateral en materia hídrica.
La Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, informó que el encuentro —de carácter virtual y de alto nivel— tiene como eje construir una ruta de entendimiento que garantice el cumplimiento del tratado sin comprometer la seguridad hídrica de las regiones fronterizas. La mandataria subrayó que el diálogo sostenido entre ambos gobiernos ha permitido mantener un “trabajo técnico riguroso” y generar condiciones para un acuerdo equilibrado.
La delegación mexicana estará integrada por funcionarios estratégicos para la gestión del agua y la relación bilateral: Julio Berdegué, secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, quien aportará el enfoque productivo y agrícola; Roberto Velasco, subsecretario para América del Norte y encargado del despacho de la Secretaría de Relaciones Exteriores, responsable de la coordinación diplomática; y Efraín Morales, titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), encargado del análisis técnico e hidrológico.
Por parte de Estados Unidos, la reunión será encabezada por Brooke Rollins, secretaria de Agricultura, y Christopher Landau, subsecretario de Estado. Ambos funcionarios han mantenido un perfil activo en los últimos meses para impulsar una agenda de cooperación hídrica que permita atender las necesidades de los estados fronterizos, especialmente en Texas y Nuevo México, donde la demanda ha aumentado.
Un diálogo marcado por la urgencia climática
La reunión adquiere relevancia ante la persistencia de sequías en varias cuencas compartidas y el incremento en el consumo agrícola e industrial. Funcionarios de ambos países han destacado que los compromisos del tratado requieren ajustes y revisiones técnicas constantes para evitar tensiones y asegurar el manejo sustentable del recurso.
Sheinbaum ha insistido en que México cumplirá con sus obligaciones internacionales, pero enfatizó que cualquier acuerdo debe proteger a los agricultores y comunidades que dependen de los afluentes del Río Bravo y otros sistemas compartidos.
Hacia un posible acuerdo antes de fin de año
De acuerdo con fuentes diplomáticas, esta quinta reunión podría ser decisiva para consolidar un esquema de cooperación actualizado que permita cerrar el año con un entendimiento más claro sobre aportaciones, mecanismos de seguimiento y criterios de distribución.
Ambos gobiernos han manifestado la voluntad de avanzar con rapidez, aunque con prudencia técnica, para evitar conflictos como los registrados en años anteriores en torno al manejo de presas y ciclos agrícolas.
La Casa Blanca y el Gobierno de México prevén emitir un comunicado conjunto una vez concluida la reunión, en caso de alcanzarse consensos sustantivos. Mientras tanto, el encuentro de hoy se perfila como un paso clave para fortalecer la diplomacia del agua y demostrar que, incluso en un escenario complejo, el diálogo técnico puede construir puentes binacionales duraderos.
