El jefe del Pentágono en el ojo del huracán, escándalos azotan la puerta
La Chispa trae novedades de nuestro vecino del norte pues el jefe del Pentágono en el ojo del huracán ya que una serie de escándalos azotan su puerta. El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, enfrenta crecientes críticas y llamados a que renuncie debido a escándalos relacionados con los ataques a presuntas embarcaciones de narcotraficantes y a su uso de la aplicación Signal para discutir información militar sensible.
Hegseth y el “Signalgate”: una controversia reavivada
Hegseth, un exoficial de la Guardia Nacional del Ejército convertido en presentador de Fox News y ahora al mando de las fuerzas armadas más poderosas del mundo, ya estuvo envuelto en polémica hace casi un año.
El caso “Signalgate” resurgió con un informe independiente que concluye que el uso de Signal “creó un riesgo para la seguridad operativa”. Esta situación ha reavivado las dudas sobre su capacidad para mantener la confidencialidad estratégica.
Implicaciones estratégicas y políticas en Washington
La campaña militar en el Caribe y el Pacífico, presentada como una lucha contra el narcotráfico, sumó tensión al debate público. Los ataques que causaron la muerte de presuntos contrabandistas reavivaron la molestia de varios sectores, poniendo al jefe del Pentágono en el ojo del huracán dentro del círculo político. Este capítulo, descrito por analistas como “muy embarazoso”, aumentó la presión dentro y fuera del Partido Republicano.
Riesgos operativos y mensajes filtrados
El informe del Inspector General asegura que Hegseth reveló información crítica sobre ataques aéreos en Yemen, exponiendo a las tropas y comprometiendo la misión. Con sus acciones, “creó un riesgo para la seguridad operativa”, detalla el documento. Esta es la segunda vez que el jefe del Pentágono en el ojo del huracán queda señalado por decisiones que podrían haber puesto en peligro vidas estadounidenses.
Nuevas críticas sobre ataques a narcotraficantes
Los ataques contra presuntos narcotraficantes también han colocado a Hegseth en una posición delicada. Legisladores describieron las imágenes como “perturbadoras”, comparándolas con un “ataque del ejército estadounidense a marinos náufragos”. Aunque algunos republicanos defienden la decisión, la polémica persiste y Naciones Unidas ha señalado indicios de ejecuciones “extrajudiciales”.
