Veracruz liberación anticipada Duarte se ve lejana
El periodista Víctor Hugo Arteaga, quien realizó una investigación en profundidad sobre las empresas fantasma en Veracruz que jugaron un papel clave en la caída política de Javier Duarte de Ochoa, ha expresado su escepticismo ante la posibilidad de que el exgobernador obtenga una liberación anticipada. Arteaga señala que, aunque Duarte ha cumplido un alto porcentaje de su condena, su salida no parece inminente.
El reportero destaca que su investigación duró 15 meses, en los que revisó miles de documentos fiscales y visitó domicilios para destapar las redes de corrupción que beneficiaban al entorno de Duarte.
Según Arteaga, el objetivo nunca fue “cazar” al exmandatario, sino revelar cómo operaba el esquema de empresas fantasma y desvío de recursos.
¿Por qué cree que Duarte no será liberado pronto?
Para Arteaga, Duarte es como “esa cajita del extintor detrás del cristal”: puede ser útil para ciertos gobiernos en ciertos momentos, pero se le “dejará hasta que lo tengan que dejar”.
Aun con un cumplimiento de hasta el 97 % de su condena, algo que, según él, bastaría para que otros presos obtuvieran beneficios, Duarte aún no ha sido liberado.
Este punto genera una reflexión sobre la desigualdad en el sistema de justicia: para Arteaga, su trabajo como periodista es clave, pues el periodismo se convierte en la “última línea de defensa” para exponer la corrupción y exigir rendición de cuentas.
Organizaciones denuncian riesgo a la justicia
La desconfianza no es solo de los periodistas. Según Propuesta Cívica, una ONG que ha criticado la idea de liberar anticipadamente a Duarte, su excarcelación sería “una afrenta a la justicia”.
La directora de la organización, Sara Mendiola, advierte que se debe tomar en cuenta no solo su conducta en prisión, sino el impacto que sus crímenes tuvieron en las víctimas, incluidos periodistas que fueron atacados durante su mandato.
Audiencia clave y tensión judicial
La resolución sobre la petición de Duarte está en manos de la jueza Ángela Zamorano Herrera, quien ha pospuesto su fallo más de una vez.
En una audiencia reciente de más de 12 horas, la defensa y la Fiscalía General de la República debatieron diversas pruebas documentales y testimoniales.
Para muchos, la decisión final no es solo una cuestión legal, sino simbólica: ¿cómo puede un exgobernador con un historial de corrupción tan grave —documentado por periodistas como Arteaga— regresar a la vida pública sin que se envié un mensaje claro sobre la rendición de cuentas?
