Sheinbaum subraya política de diálogo con la juventud y se deslinda de señalamientos sobre represión tra
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, afirmó este lunes que los hechos violentos registrados durante la marcha del pasado 15 de noviembre no pueden atribuirse a la juventud mexicana, al destacar que la participación real de jóvenes fue mínima y que la mayoría de quienes se movilizaron no pertenecen a la llamada Generación Z.
En conferencia, la mandataria adoptó un enfoque de defensa y reivindicación del papel de los jóvenes dentro del proyecto de la Cuarta Transformación, subrayando que su gobierno mantiene una política basada en el diálogo, la inclusión y el respeto absoluto a sus derechos.
Sheinbaum señaló que en México no existe represión hacia la juventud y que, por el contrario, las y los jóvenes se han convertido en una de las principales bases sociales de su administración gracias al acceso a becas, oportunidades educativas, empleo y programas de apoyo.
“Los jóvenes mexicanos no son violentos, no son violentos; y hay que escucharlos. Siempre hay que escuchar a los jóvenes. Este no es un asunto contra la Generación Z o los jóvenes, porque en realidad marcharon muy poquitos jóvenes”, remarcó.
La Presidenta insistió en que cualquier intento por vincular los disturbios con un supuesto malestar juvenil responde a intereses políticos ajenos a la realidad del país. Aseguró que la estrategia del gobierno se centra en abrir espacios de participación y atender demandas legítimas que puedan surgir desde este sector.
“En México no se reprime a los jóvenes. Al revés, les damos becas, escuelas, trabajo; abrazamos a los jóvenes y los escuchamos. Si hay alguna demanda legítima, justificada, hay que atenderla”, enfatizó.
El gobierno federal ha destacado que programas como Becas Benito Juárez, Jóvenes Construyendo el Futuro y la expansión de universidades públicas han permitido que millones de jóvenes encuentren opciones educativas y laborales, lo que —según Sheinbaum— ha sido clave para evitar que la juventud sea captada por dinámicas violentas o manipulada políticamente.
La mandataria concluyó que su administración continuará promoviendo el diálogo abierto con las juventudes y rechazando cualquier forma de estigmatización hacia ellas, especialmente ante coyunturas donde ciertos grupos buscan aprovechar incidentes aislados para construir narrativas de confrontación.
