Sheinbaum llama a un debate responsable sobre la reforma para adelantar la revocación de mandato
La presidenta subraya que el mecanismo no es nuevo y defiende su origen democrático impulsado por López Obrador
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo hizo un llamado este martes a abrir un debate amplio, informado y sin prisas sobre la reforma que busca adelantar la fecha de la revocación de mandato presidencial. Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, la mandataria advirtió que este tema debe analizarse “con responsabilidad” y no aprobarse “al vapor”, pues implica una modificación relevante al calendario político nacional.
Sheinbaum precisó que la figura de la revocación de mandato no es una propuesta de su administración, sino un mecanismo constitucional impulsado por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, bajo el principio de que los gobiernos deben mantenerse sujetos al escrutinio del pueblo.
“La revocación de mandato la propuso el presidente López Obrador y la llevó a la Constitución. Él planteó que los gobiernos no pueden ser una carga para el pueblo y que el presidente tiene que ponerse a revisión del pueblo a la mitad de su mandato”, recordó la mandataria.
La presidenta también rememoró que López Obrador aplicaba este principio desde su gestión como jefe de Gobierno del entonces Distrito Federal, cuando cada dos años se sometía a ejercicios ciudadanos de evaluación telefónica para conocer la percepción de la población sobre su desempeño.
Debate legislativo sobre la fecha, no sobre la figura
Sheinbaum enfatizó que el debate en la Cámara de Diputados no gira en torno a la creación del mecanismo —ya existente en la Constitución—, sino a la fecha en que se realizaría la próxima consulta, la cual algunos legisladores proponen adelantar de 2028 a 2027.
“Algunos diputados plantearon que se hiciera en 2027 y no en 2028. Es algo que hay que analizar, no aprobar rápido al vapor, pero es una buena propuesta”, puntualizó.
Desde su perspectiva, la iniciativa tiene un sentido práctico y financiero, pues la revocación de mandato podría realizarse el mismo año que las elecciones federales intermedias, lo que evitaría duplicar costos y movilizar nuevamente al aparato electoral.
“Se haría al mismo tiempo que la otra elección y no se tendrían que destinar recursos al siguiente año, como ocurrió en el caso del presidente López Obrador”, explicó.
Llamado a un diálogo plural y sin prisas
Pese a reconocer la viabilidad de la propuesta, Sheinbaum insistió en que el tema debe discutirse sin precipitación y con la participación de todas las fuerzas políticas, garantizando que la decisión final cuente con legitimidad y respaldo ciudadano.
“No necesariamente tiene que aprobarse ahora; es una propuesta de diputados y puede revisarse en el siguiente periodo. Lo importante es que se discuta, que se abra el debate y que no se apruebe al vapor”, afirmó.
Finalmente, la presidenta reiteró que el mecanismo de revocación ya está garantizado en la Constitución y forma parte de los avances democráticos impulsados durante el sexenio anterior. Lo que se define ahora, subrayó, no es su existencia, sino el momento en que volverá a aplicarse.
“El pueblo de México debe tener claro que la revocación de mandato ya existe gracias a López Obrador; lo único que se discute es si se realizará en 2027 o en 2028”, concluyó.
Con este posicionamiento, Sheinbaum busca abrir un espacio de reflexión legislativa y ciudadana, alejándose de la aprobación acelerada de reformas, y manteniendo el espíritu participativo que dio origen a uno de los mecanismos más emblemáticos de la llamada Cuarta Transformación.
