EEUU veta nuevamente resolución de la ONU que pedía alto el fuego en Gaza
 
						 
			En un nuevo giro en el conflicto de Medio Oriente, EEUU veta nuevamente resolución de la ONU que buscaba frenar la violencia en Gaza. La noticia ha generado gran controversia a nivel internacional y refuerza el papel de Estados Unidos como principal actor que obstaculiza un consenso global en torno a un alto el fuego en Gaza.
La postura de Washington
La decisión de Washington no sorprende a los diplomáticos. Esta acción se enmarca dentro de una serie de bloqueos previos en el Consejo de Seguridad de la ONU, donde Estados Unidos ha protegido reiteradamente los intereses de Israel.
El pasado jueves 18 de septiembre de 2025, el veto volvió a marcar un precedente que divide profundamente a las potencias mundiales.
EEUU veta nuevamente resolución de la ONU: la votación que sacudió a la diplomacia
El documento vetado fue presentado por los diez miembros no permanentes del Consejo: Argelia, Dinamarca, Eslovenia, Grecia, Guyana, Pakistán, Panamá, República de Corea, Sierra Leona y Somalia.
Mientras tanto, las potencias permanentes Rusia, China, Francia y Reino Unido votaron a favor. Sin embargo, la negativa estadounidense bloqueó la propuesta, recordando al mundo que, pese al apoyo global, la última palabra sigue en manos de Washington.
La representante estadounidense, Morgan Ortagus, declaró que la resolución “no condena a Hamás ni reconoce el derecho de Israel a defenderse”, justificando así el veto. Según ella, la narrativa de la ONU legitima a los grupos armados y no atiende a la seguridad israelí.
Este argumento fue recibido con críticas de la mayoría de los miembros presentes, que ven la postura estadounidense como un obstáculo para detener la escalada de violencia.

La repetición de un patrón en el conflicto
No es la primera vez que Estados Unidos recurre a esta estrategia. Desde el inicio de la guerra, Washington ha vetado al menos seis resoluciones similares, incluyendo la de junio pasado. En aquella ocasión, también se solicitaba un alto el fuego inmediato, incondicional y permanente en Gaza, junto con la liberación de rehenes y la entrada de ayuda humanitaria.
Este patrón refuerza la narrativa de que EEUU veta nuevamente resolución de la ONU con la finalidad de proteger a Israel, incluso cuando las consecuencias humanitarias son devastadoras. Los analistas políticos señalan que este bloqueo diplomático aumenta la presión internacional sobre la administración Trump, pero al mismo tiempo fortalece su alianza histórica con Israel.
Impacto humanitario: Gaza al borde del colapso
Las consecuencias del veto son devastadoras para la población civil. Según las autoridades locales, el conflicto ya ha dejado más de 65.000 muertos. La situación humanitaria empeora cada día: los palestinos enfrentan hambruna, bloqueo de ayuda humanitaria y una infraestructura devastada.
Los organismos internacionales alertan que, si no se permite el ingreso inmediato de suministros, la crisis podría convertirse en la peor catástrofe humanitaria de la última década. Los diplomáticos de la ONU aseguran que la negativa estadounidense “condena a la población civil a sufrir más violencia y hambre”.
¿Hacia dónde se dirige la política exterior de EEUU?
El veto estadounidense refleja una política exterior cada vez más cuestionada en los foros internacionales. Mientras que el mundo pide soluciones pacíficas, Washington apuesta por una narrativa de seguridad nacional y defensa de Israel.
La repetición de estas posturas en el Consejo de Seguridad de la ONU deja claro que no habrá consenso global sin la aprobación de la Casa Blanca.
La comunidad internacional, sin embargo, insiste: la prioridad debe ser el alto el fuego en Gaza, la liberación de rehenes y el acceso seguro de ayuda humanitaria. El dilema ahora es si Estados Unidos cederá en su postura o seguirá ejerciendo el poder de veto con consecuencias cada vez más graves para la región.
 
		
