La ayuda humanitaria en Gaza es una trampa mortal. 800 personas fallecen buscando comida


La Chispa trae noticias del Medio Oriente que demuestra la crueldad de Israel. En esta cobertura especial del conflicto en Medio Oriente, te revelamos una realidad silenciada por muchos medios: la ayuda humanitaria en Gaza es una trampa. Desde finales de mayo, cerca de 800 personas han perdido la vida intentando obtener asistencia básica. Pero, ¿cómo es posible que algo destinado a salvar vidas esté provocando tantas muertes?
La trampa oculta tras los repartos de comida en Gaza
La Fundación Humanitaria para Gaza (GHF) comenzó sus operaciones a finales de mayo, con apoyo logístico de Estados Unidos e Israel. Pero lo que debía representar alivio para la población se convirtió en un campo de muerte. La ONU ha confirmado que la mayoría de las víctimas murieron cerca de los puntos de distribución, tiroteadas en su intento por acceder a alimentos. Este hecho respalda la frase clave: la ayuda humanitaria en Gaza es una trampa diseñada para servir a otros intereses.
¿Por qué la ONU rechaza trabajar con GHF?
Desde el primer momento, la ONU y diversas ONG internacionales se negaron a colaborar con la GHF. Aseguran que la organización no cumple los principios humanitarios y sirve a intereses militares. Esta acusación se ve reforzada por los datos: entre el 27 de mayo y el 7 de julio, 798 personas murieron, 615 de ellas cerca de instalaciones de esta fundación. La supuesta ayuda se convirtió en una operación encubierta para el control de civiles palestinos, una situación que encaja en el argumento de que la ayuda humanitaria en Gaza es una trampa encubierta.
La reacción internacional y la falta de justicia
Pese a la magnitud del desastre, las reacciones internacionales han sido tibias. El ejército israelí respondió con declaraciones evasivas, afirmando que trató de minimizar “posibles fricciones”. Sin embargo, el hecho de que la mayoría de las heridas fueran provocadas por disparos desmiente cualquier intención pacífica. Aquí se percibe una clara contradicción con el derecho internacional humanitario.
Un genocidio disfrazado de ayuda
Esta operación no solo ha causado muertes masivas, sino que expone una estrategia clara de debilitamiento sistemático del pueblo palestino. El acceso a la ayuda no debería representar una sentencia de muerte.