¿Por qué hay ciudadanos chinos trabajando en fábricas rusas? Descubre la verdad
La Chispa trae noticias internacionales bastante serias. El presidente Zelenski afirma que hay ciudadanos chinos trabajando en fábricas rusas. Esto quiere decir que China no solo envió soldados para apoyar a Rusia, también envió su población civil, algo que nunca se había visto. El presidente Volodímir Zelenski afirmó el martes que ciudadanos chinos trabajando en fábricas rusas están involucrados en la producción de aviones no tripulados (drones) en Rusia y sugirió que Moscú podría haber “robado” tecnología de estos aviones de Pekín.
¿Realmente hay chinos trabajando en fábricas rusas?
Recientemente, el presidente ucraniano hizo un comentario en una rueda de prensa en Kiev sobre la implicación de ciudadanos chinos trabajando en fábricas rusas. Afirmó que estos trabajadores chinos están siendo utilizados en centros de producción de alta tecnología, particularmente en la fabricación de drones y otros sistemas militares avanzados. Esta afirmación ha levantado serias preocupaciones sobre la relación estratégica entre China y Rusia, y si Pekín está violando alguna normativa internacional al involucrarse tan directamente en el conflicto.
La acusación de robo de tecnología
Zelenski sugirió que Rusia podría haber “robado” tecnología de aviones no tripulados a China, lo que añade más misterio al papel de China en el apoyo de Rusia. Esta situación es alarmante no solo porque involucra a civiles chinos en actividades bélicas, sino también porque China ha negado rotundamente cualquier tipo de apoyo militar a Rusia, algo que parece contradecir las pruebas presentadas por Ucrania.
La presencia militar de China en el conflicto
No es la primera vez que se menciona la presencia de ciudadanos chinos trabajando en fábricas rusas. Hace unos días, las fuerzas ucranianas detuvieron a dos soldados chinos que estaban combatiendo en las líneas del frente. Lo que podría ser una indicación de que el apoyo de China a Rusia es más profundo de lo que muchos creían. El hecho de que civiles y no solo militares chinos estén involucrados plantea nuevas preguntas sobre la participación de Pekín en la guerra.
