Zona de pesca azolvada y llena de chatarras de plataformas petroleras


La actividad de la planta de nitrógeno en la comunidad de San Antonio Cárdenas, ha causado el azolvamiento de playas y costas de la Península de Atasta, además las chatarras de plataformas marinas provoca afectaciones en las artes de pesca
Ciudad del Carmen, Camp.__ Por años, las playas y las costas de la comunidad de Emiliano Zapata, Península de Atasta, donde realizamos nuestro trabajo de pesca se azolvó, y es un problema grande para los pescadores, además, las zonas de pesquería se encuentran llenas de chatarras, porque las empresas que trabajaron para retirar las estructuras, dejaron chatarras de plataformas en el fondo marino, dijo Leonardo Hernández Domínguez, presidente de la Unión de Cooperativas Pesqueras Ribereñas y Acuacultores “Lomas de Román”.

Expresó que la zona de playas se llenaron de lodo y los pescadores se han visto obligados a arrastrar sus lanchas entre lodo, para varar la embarcación en un lugar seguro, además, el lodo está ocasionando daños a la salud de los pescadores, e imposibilita que realice la pesca del camarón siete barbas, porque toda la zona está llena de lodo, y cuando los pescadores tiran las redes y realizan el arrastre, la red se atasca, por lo tanto, lo poco que arrastran no es redituable para el sector pesquero.
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Por otra parte, dijo que antes de que se instalara la Planta de Nitrógeno en el poblado de San Antonio Cárdenas, las playas estaban limpias, sin embargo, cuando dicha planta entra en funciones para fortalecer la producción petrolera, comienza a causar afectaciones al sector pesquero ribereño, ya que el agua de mar que absorbe para enfriar el equipo, regresa al mar, pero con lodo y todo eso ha ocasionado el azolve de las playas y costas.
Empresas dejan chatarras de plataformas marinas
“Además, muchas empresas que no son mexicanas y que le trabajan a Petróleos Mexicanos (Pemex), dejan las chatarras en el fondo marino, y en la capacitación que nos impartieron hoy, tocamos ese tema con la Semarnat y la Semar, porque a los pescadores les ha sucedido que cuando están en la actividad pesquera del camarón siete barbas, se atoran las redes, y como no traemos equipo de buceo para destrabar la red, los pescadores deciden cortar la malla”, agregó.
Apuntó que, eso representa pérdidas económicas para los pescadores, pero, aparte de ello, esas redes que se quedan en el fondo del mar, también representa peligro para las tortugas marinas.
“En el taller, solicitamos que a los pescadores se les capacite con el equipo GPS, para marcar las zonas donde se encuentran las chatarras y con ello, se pueda investigar a la empresa que trabajó ahí para que recoja su chatarra, en bien de la preservación del medio ambiente marino”, indicó.