Un apagón golpea a Chile y el gobierno declara toque de queda
La Chispa informa que, Chile sufrió un apagón masivo y a pesar de que la electricidad se había restablecido para la mayoría de los habitantes al llegar la medianoche, la situación seguía siendo inestable. El presidente Gabriel Boric responsabilizó a las empresas eléctricas por su falta de rapidez en la respuesta.
Apagón masivo en Chile: caos y respuesta gubernamental
El gobierno chileno decretó el martes un toque de queda y desplegó tanto al ejército como a agentes de la policía nacional para patrullar las calles tras un apagón de gran magnitud que dejó sin luz a la mayor parte del país. El corte de energía, que comenzó en la tarde, afectó a alrededor de ocho millones de hogares en esta nación sudamericana de 19 millones de habitantes, según las autoridades. La interrupción del suministro eléctrico se extendió a lo largo de unos 965 kilómetros, desde Arica en el norte—una zona clave por su actividad minera—hasta Los Lagos en el sur. En Santiago, el apagón dejó semáforos sin funcionar, atrapó a personas en ascensores y paralizó el sistema de metro.
Restablecimiento parcial de electricidad y medidas de emergencia
Para la medianoche, el 90 % de los hogares ya contaban nuevamente con electricidad, según informó el Coordinador Eléctrico Nacional. Las autoridades aseguraron que el suministro estaría completamente restablecido al amanecer. Previamente, el gobierno había establecido un toque de queda desde las 10:00 p. m. hasta las 6:00 a. m. en las zonas afectadas. Además, las escuelas de esas regiones permanecerían cerradas el miércoles, afectando a aproximadamente 300.000 estudiantes, según informaron las autoridades.
Testimonios de caos y desesperación en las calles
“El día de hoy ha sido difícil para millones de compatriotas”, declaró el presidente Gabriel Boric en una conferencia de prensa la noche del martes.
“Todos corrían por la calle para encontrar transporte”, relató Patricio Rodríguez, de 35 años. “La gente entró en pánico, solo querían llegar a sus casas”.
Rodríguez explicó que tuvo que caminar más de 14 kilómetros para llegar a la casa de su tía. “Había conductores circulando en sentido contrario por las avenidas, fue un verdadero caos”, comentó. “Por un momento, parecía el Lejano Oeste, como un pueblo sin ley”.
Respuesta de las autoridades y despliegue de seguridad
En respuesta al toque de queda, soldados fueron desplegados en camiones en las zonas afectadas, mientras que la policía nacional se encargó de dirigir el tráfico y vigilar las calles. En Santiago, helicópteros sobrevolaban la ciudad.
A través de redes sociales, la policía nacional informó que había rescatado a residentes atrapados en ascensores y a personas que no podían salir de comercios debido a las puertas automáticas bloqueadas.
Algunas regiones también sufrieron cortes en el suministro de agua potable, indicaron las autoridades. Mientras tanto, hospitales, aeropuertos, prisiones y servicios de emergencia en todo el país operaban con generadores y sistemas eléctricos de respaldo, informó el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres.
Contexto económico y social: desigualdad en Chile
En las últimas décadas, Chile ha experimentado un fuerte crecimiento económico gracias a su producción de cobre y el auge de las materias primas. Sin embargo, esta prosperidad no se ha distribuido de manera equitativa, y la desigualdad sigue siendo un problema estructural.
Esta disparidad fue un factor clave en las protestas de 2019, algunas de ellas violentas, que impulsaron la llegada al poder de Gabriel Boric, un exlíder estudiantil y abogado. Elegido presidente en 2021 con una agenda progresista, promovió la redacción de una nueva Constitución para reemplazar la impuesta durante la dictadura de Augusto Pinochet.
Sin embargo, el proyecto constitucional, que proponía amplias reformas en un país de tradición conservadora, fue rechazado en 2022. Un año después, una versión más moderada también fue descartada. Desde entonces, Boric ha adoptado un enfoque más equilibrado, priorizando mejoras en los servicios básicos para la población.
