Clara Brugada reafirma su compromiso con la seguridad en el Metro, tras accidente de la pequeña Romina
La Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada Molina, visitó este 24 de diciembre a Romina, la niña que sufrió una severa lesión en el rostro tras caer de una escalera eléctrica sin protección en el Centro de Transferencia Modal (CETRAM) Periférico Oriente, de la Línea 12 del Metro.
Un mensaje de esperanza y acción
En sus redes sociales, Brugada compartió imágenes de su encuentro con la menor y su familia, destacando su rápida recuperación y reafirmando el apoyo integral del Gobierno de la Ciudad para asegurar su bienestar.
“Nos da mucho gusto ver que se recupera rápidamente. Estamos muy pendientes de la evolución satisfactoria de su salud y atentos de que no les falte nada. Avanzamos en las obras necesarias para que nunca vuelvan a ocurrir eventos de esta naturaleza”, escribió.
La mandataria aseguró que se trabaja en acciones inmediatas para reforzar la seguridad en las instalaciones del Metro y los CETRAM, con énfasis en evitar accidentes similares.
Acciones tras el accidente
El incidente, que encendió alarmas sobre las condiciones de seguridad en el transporte público de la capital, ha llevado al gobierno local a priorizar medidas correctivas en la infraestructura. La Secretaría de Movilidad y el Sistema de Transporte Colectivo Metro han anunciado una revisión exhaustiva de las escaleras eléctricas y áreas de riesgo en estaciones clave.
Atención integral a Romina
Romina, quien fue dada de alta el 23 de diciembre tras una cirugía reconstructiva de nariz, ha recibido apoyo médico y psicológico por parte del gobierno capitalino. La familia ha expresado su agradecimiento por la atención brindada y el compromiso mostrado por las autoridades.
Reacciones y compromiso con la seguridad
El caso ha generado un llamado a mejorar la infraestructura del transporte público. Clara Brugada destacó que se realizarán obras y adecuaciones necesarias para garantizar la seguridad de los usuarios, en especial de niñas, niños y adultos mayores.
Con este gesto y su compromiso público, la mandataria busca enviar un mensaje claro: la seguridad de la ciudadanía es una prioridad, y no se escatimarán esfuerzos para mejorar las condiciones del transporte público en la Ciudad de México.
Este incidente marca un punto de inflexión para reforzar la supervisión de los espacios urbanos, asegurando que sean seguros y accesibles para todas las personas.
