Olímpico fracaso
Por Jorge Carrasco V.
Se había celebrado con bombo y platillo el auge del béisbol durante el último año. Se mencionaba la buena actuación en el Mundial que incluso hacía que México apareciera en el segundo lugar solamente atrás del campeón Japón.
El presidente de la Liga Mexicana Horacio de la Vega se vanagloriaba de que el béisbol mexicano vivía según él, el mejor momento de su historia con un aumento en las entradas de algunos equipos.
Todos estos argumentos cayeron por tierra, al ser eliminada la escuadra azteca en el torneo preolímpico celebrado en Zapopan.
El bombero manejador Benjamín Gil, se quejaba de la baja asistencia y el poco apoyo al equipo.
Pero eso se veía venir con el nulo apoyo que se le dió a la organización del equipo por parte de La Liga del Pacífico, la poca difusión y la renuncia de Rodrigo López al comité de selecciones.
A esto hay que añadir la soberbia de los directivos de una liga que solamente piensa en sus propios intereses y que tiene una visión vocalista de su circuito, y que se guardó a sus mejores jugadores.
Sorprendió sin embargo que la escuadra mexicana cayera ante Venezuela y Panamá, y aunque los triunfos sobre Puerto Rico y Países Bajos dieron una esperanza, la paliza de un juvenil equipo norteamericano acabó con el sueño de asistir a otros Juegos Olímpicos, en los que por cierto ya Benjamín Gil había fracasado rotundamente.
Se han comenzado a cosechar los yerros de los directivos, como los de permitir hasta 20 extranjeros por equipo y el nulo apoyo a los peloteros nacionales. Conviene recordar que éste año solamente un connacional debutó en Grandes Ligas.
Lo más grave del asunto es poner al frente de la liga a un personaje al que no le gusta el béisbol y que solamente lo utiliza como vehículo para su lucimiento personal.