Altar monumental del México prehispánico deslumbra en el Palacio Municipal de Centro
El altar monumental del México prehispánico deslumbra a cientos de visitantes en el Palacio Municipal de Centro. Con más de 30 cráneos de gran dimensión instalados en el portón frontal y en la explanada de la Plaza de La Revolución, el encendido del “Tzompantli monumental: Eternidad” ha dejado impactados a los asistentes. Esta obra rinde homenaje a las antiguas tradiciones mexicanas, donde la muerte era vista como un sacrificio necesario para la existencia. En este evento, organizado por el Ayuntamiento de Centro, se celebra la riqueza cultural del Día de Muertos.
Altar Monumental del México Prehispánico: El Deslumbrante Encendido del Tzompantli
El encendido del altar, realizado en el cuarto día del Festival “Celebrando la Eternidad”, fue un espectáculo lleno de simbolismo. Las luces de colores iluminaban la fachada del Palacio Municipal, mientras que una enorme cruz, elaborada con flores de cempasúchil, se alzaba con imponencia. La música fúnebre de fondo acompañó una cuenta regresiva que culminó con la aparición de esta obra, creada por el artista en cartonería Héctor Fernández.
La presidenta municipal de Centro, acompañada del secretario del Ayuntamiento, José Antonio Alejo Hernández; la directora de Educación, Cultura y Recreación (DECUR), Alexandra Rebolledo González y la directora de Administración, Aura Medina Cano, presenciaron la explicación del artista de origen oaxaqueño, radicado desde hace 36 años en Tabasco.
La Significancia del Tzompantli en la Cultura Prehispánica
Héctor Fernández, expuso que el tzompantli es un símbolo profundo del México prehispánico, utilizado para honrar a los dioses mediante sacrificios humanos. Las cabezas de los enemigos y prisioneros eran exhibidas como muestra de poder y devoción, asegurando así la protección divina. Este elemento cultural era más que una simple estructura: representaba un puente entre la vida y la muerte.
La palabra “tzompantli” proviene del náhuatl y significa “hilera de cráneos” o “fila de cabezas”. Esta estructura estaba compuesta por una serie de postes verticales unidos por varas horizontales que sostenían las cabezas.
