Petroleros sin líder
Los espacios para Pemex y la CFE han dado mucho de qué hablar en los últimos días, proyectos trascendentales que buen podrían arrancar una declaración o un comentario del sindicato petrolero, pero pareciera que se esconde de los medios y no quiere saber nada de la opinión pública.
El 26 de septiembre hubo un zafarrancho afuera de las instalaciones de su sindicato nacional, en la colonia Gurrero de la Ciudad de México, donde uno de los líderes resultó golpeado, además de otros miembros del gremio con lesiones, así como daños materiales del inmueble. Nunca declaró nada al respecto la dirigencia sindical, su líder nacional, el priísta, Ricardo Aldana, simplemente omitió opinión.
Después. el 11 de octubre, fecha de la fuga de sulfuro en las instalaciones de PEMEX en Deer Park provocó dos víctimas mortales y cinco trabajadores heridos, en que el sindicato pareció no conocer la noticia, que tiene consecuencias serias para la empresa estatal Pemex como para su sindicato.
Posteriormente el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana publicó la convocatoria para renovar la secretaría general, que actualmente ocupa Ricardo Aldana, así como el Comité Ejecutivo Nacional para el periodo que va del primero de enero de 2025 al 31 de diciembre de 2030.
Dicha convocatoria no tiene el esencial visto bueno de la secretaría del trabajo y previsión social, ni el sello de la empresa, ni las firmas correspondientes de los líderes sindicales responsables de dicha invitación.
Es un documento tendencioso y propagandístico que debiendo ser imparcial en su cuerpo señala: “A diferencia del proceso en el que Aldana quedó electo, con voto virtual, en esta ocasión en la convocatoria dice que “a efecto de establecer un procedimiento que salvaguarda el pleno ejercicio del voto personal, libre, directo y secreto de los socios; se ha determinado llevar a cabo la elección de forma presencial en 292 casillas, que se instalarán para tal fin en los centros de trabajo de Pemex en jurisdicción de las 36 secciones del STPRM y en el Hospital Central Sur de Alta Especialidad (Picacho)”.
Las elecciones pasadas tuvieron como preámbulo una pasarela acompañada sorpresivamente, por el propio Presidente de la República, eran condiciones extrañas e inexplicables pero quisieron darle una apariencia de equidad y transparencia, cuando desde el primer aparecido en la pasarela se sabía que el elegido sería Ricardo Aldana, incondicional del anterior líder, Carlos Romero Deschamps, conocido por sus corruptelas y delitos que van desde la sospecha de asesinato hasta lavado de dinero.
Lo que quiere Aldana, en realidad, es reelegirse discretamente, sin convocatoria auténtica y sin elecciones. Así, se descalifica la convocatoria, el tiempo de tomar posesión llega y automáticamente sigue al frente. Quiere llegar al periodo de elección y de renovación de dirigencia sin la participación de los trabajadores.
Si los convocados hacen caso y compiten, Aldana puede arrebatarles el triunfo diciendo que la convocatoria era apócrifa o simplemente le faltaban sellos o autorizaciones.
Al llegar a la secretaría general Aldana la gran mayoría delos trabajadores petroleros estuvieron inconformes sólo al Presidente aprecia no extrañarle.
Para disimular su intención reeleccionista, propone revocación de mandato para el 2027 y más inclusión femenina fue parte del discurso que Ricardo Aldana, porque entre sus cartas para manejar a una candidata como dirigente sindical, en caso de haber elecciones tiene a varias incondicionales que figuran como aparentes líderes disidentes, pero en realidad están manejadas por él. Tiene una estrategia para lanzar a sus compañeras con la consigna de que es tiempo de mujeres.
La urgente necesidad de quitar a Aldana de líder nacional del sindicato petrolero, podría hacer de unas elecciones sin los protocolos aplicados, un triunfo democrático del gremio, siempre y cuando actúen todos o la gran mayoría, dentro de las normas electorales del sindicato.
La necesidad de transformar este sindicato es asunto de todos los mexicanos y afecta a todo el país y coloca en la línea de las críticas al actual gobierno. No se trata de un simple cambio de nombres en el sindicato sino de la ruptura que inexplicablemente no sucedió hace casi tres años.
Desde la postulación de candidatos a la secretaría general del sindicato, deberá encarnar cambios, dentro de esta nueva etapa que debe iniciarse desde las bases se postula a quien fuera candidato independiente, al margen de las tradiciones oscuras de los líderes de las secciones del terror y con un expediente limpio, que podría revertir las intenciones reeleccionistas.
Las bases impulsan la candidatura de José Valenzuela Juárez, presidente de la Comisión de Vigilancia, Honor y Justicia del STPRM y vicepresidente de la Comisión de Contratos del Comité Ejecutivo General, quien requiere de un gremio unido e interesado por la transformación auténtica para llegar.
