El PAN, entre la continuidad y el cambio
Por: Adrián Arévalo
El Partido Acción Nacional está en la víspera de elegir a un nuevo secretario general y no va a ser en definitiva un proceso terso, por el contrario, está marcada por una fuerte competencia interna y divisiones claras dentro del partido. A nivel nacional, los principales actores que aspiran a la dirigencia son Jorge Romero, Damián Zepeda y Adriana Dávila. Entre ellos existen quienes buscan mantener el control tradicional y quienes abogan por una renovación profunda. Estas facciones tienen un impacto directo no solo a nivel nacional, sino también en estados clave como Yucatán, donde líderes locales como Renán Barrera también aspiran a tomar roles clave en la dirigencia estatal del partido.
Adriana Dávila, exsenadora y candidata a la presidencia del PAN, ha resaltado la necesidad de democratizar el partido y ha criticado fuertemente a ciertos grupos internos que, según ella, han traicionado los principios del PAN. Dávila es parte de un grupo que busca una renovación profunda en la organización, cuestionando el liderazgo actual de personajes como Marko Cortés y Ricardo Anaya, ha hablado de sancionar a quienes hayan usado el partido para beneficios personales, mencionando directamente a figuras como los Yunes en Veracruz. Aunque reconoce la división interna, cree que estas diferencias son normales en una democracia y promueve un cambio más institucionalizado, sin rupturas extremas
Damián Zepeda, senador por Sonora y exsecretario general del PAN, es conocido por su postura crítica hacia el gobierno de López Obrador, de la administración actual de Marko Cortés y del partido como institución. Su trayectoria como secretario general durante la presidencia de Ricardo Anaya y su breve tiempo como presidente interino del PAN le otorgan experiencia y visibilidad. Zepeda es una voz reconocida en el Senado y ha hecho fuertes señalamientos a la necesidad de que el PAN vuelva a sus bases ideológicas y deje de centrarse en cúpulas de poder que, en su opinión, han perdido el rumbo, pero su principal desafío es competir contra las facciones más alineadas con Jorge Romero.
Jorge Romero es un político fuerte dentro del PAN y cuenta con el respaldo de figuras clave en la Ciudad de México. Su cercanía con Santiago Taboada y Mauricio Tabe, ambos políticos influyentes en la CDMX, lo convierte en el favorito de un sector que aboga por la continuidad del proyecto de Marko Cortés. Este grupo representa la “estructura” más tradicional dentro del PAN, que ha resistido intentos de reformas profundas .
Por otro lado, Manuel Gómez Morín, nieto del fundador del PAN, representa a una corriente más disidente que ha pedido la suspensión de las elecciones internas para primero llevar a cabo una reforma profunda del partido. Gómez Morín no apoya la forma actual del proceso de elección y considera que el PAN debe primero corregir sus problemas internos antes de elegir nuevos líderes, Gómez Morín ha enfatizado que su partido debe reenfocar su misión como un instrumento al servicio de la democracia y de los mexicanos. A diferencia de Dávila, Gómez Morín promueve una pausa total en el proceso de elección para replantear el rumbo del partido.
En cuanto a Yucatán, la dinámica interna del PAN se verá influenciada por el resultado de la elección nacional, ya que los liderazgos locales suelen alinearse con las corrientes ganadoras. Además, se prevé una renovación de las dirigencias estatales tras la elección federal, lo que será clave para definir la futura estrategia local del PAN en un estado donde el partido ha tenido una presencia fuerte en los últimos años, a pesar de haber perdido la gubernatura a manos del partido oficial, mantuvieron la capital con Cecilia Patrón.
En el contexto estatal, Renán Barrera, ex alcalde de Mérida, tiene aspiraciones de convertirse en el próximo presidente del PAN en Yucatán. Barrera pertenece es una de las figuras más importantes del PAN en el estado y ha sido visto como un líder pragmático, capaz de balancear las relaciones con la base tradicional del partido y con los nuevos sectores que buscan reformas. En Yucatán, el PAN ha tenido un control considerable en los últimos años, tanto a nivel municipal como estatal, y Barrera busca consolidar esa fuerza. Sin embargo, su candidatura también enfrenta desafíos, dado que los resultados del PAN a nivel nacional en 2024 influirán en cómo se configuran las alianzas y el liderazgo estatal. Además, dentro del PAN de Yucatán, existen otras figuras emergentes que podrían disputar el control estatal si Barrera no logra unir a todas las facciones locales. La situación en el estado refleja, en menor escala, la dinámica de poder del PAN a nivel federal: una lucha entre la continuidad y el cambio
La elección del PAN para la dirigencia nacional y estatal, no solo se basa en nombres, sino en ideologías y visiones diferentes sobre el futuro del partido. Jorge Romero representa la facción más conservadora y alineada con el actual liderazgo, mientras que Damián Zepeda y Adriana Dávila lideran la demanda por un cambio y una mayor democratización interna. En Yucatán, Renán Barrera busca aprovechar el capital político que ha construido como alcalde, pero deberá navegar las tensiones que se están generando a nivel nacional para lograr su objetivo, luego de no obtener la gubernatura.
Los grupos dentro del PAN de Yucatán
Renán Barrera, ex alcalde de Mérida, se le considera un candidato natural para ocupar la presidencia estatal del partido. Su grupo tiene una visión pragmática de la política y busca mantener el control de las estructuras del partido en Yucatán, capitalizando su gestión en Mérida, que ha sido bien valorada por algunos sectores, no así en la pasada contienda electoral.
Barrera es conocido por su cercanía con el gobernador Mauricio Vila Dosal, con quien ha colaborado estrechamente. Ambos pertenecen a una corriente pragmática que prioriza la gestión eficiente y que ha sabido capitalizar su imagen como políticos que han mantenido a Mérida y al estado de Yucatán entre los más seguros y con mejor calidad de vida del país.
Aunque tanto Mauricio Vila como Barrera han trabajado juntos, Mauricio Vila, ex gobernador del estado, también tiene su propia estructura de poder dentro del PAN. Vila es una figura clave a nivel nacional, ahora como Senador de la República, incluso ha sido mencionado como posible contendiente a la presidencia en el futuro. A nivel estatal, Vila ha mantenido una gestión enfocada en la atracción de inversiones y el desarrollo económico, lo que ha consolidado su liderazgo, pero también genera tensiones dentro del PAN con otras facciones que buscan mayor espacio político. Por otra parte existe un grupo dentro del PAN de Yucatán que representa a los sectores más conservadores y tradicionales del partido. Estos panistas se sienten marginados por las nuevas dinámicas de poder representadas por Vila y Barrera. Esta facción está compuesta por algunos militantes de larga data que se identifican con los valores fundacionales del partido y que están más alineados con las corrientes críticas a nivel nacional que piden una mayor democratización y transparencia en los procesos internos.
Algunos nombres de líderes que representan esta facción incluyen a Asís Cano Cetina, exdirigente estatal del partido, quien ha sido una figura clave para la facción más tradicional y crítica dentro del PAN en Yucatán. Además, Cecilia Patrón Laviada, aunque alineada con Vila y Barrera, ha sido mencionada como figura influyente en los sectores más conservadores.
Existen otras figuras emergentes dentro del PAN yucateco que buscan ganar relevancia. Entre ellas se destacan políticos jóvenes que han ocupado cargos locales y municipales, y que podrían desempeñar un papel clave en el futuro del partido, dependiendo del resultado de las elecciones nacionales en 2024 y de cómo se configuren las alianzas dentro del PAN local. Además, el resultado de la elección interna del PAN a nivel federal podría influir directamente en el panorama estatal. Si las corrientes reformistas y críticas, como las de Adriana Dávila o Damián Zepeda, ganan poder, es probable que ciertos sectores del PAN yucateco busquen alinearse con esos grupos para contrarrestar el liderazgo actual de Barrera y Vila. El PAN de Yucatán enfrenta un panorama de competencia interna entre los grupos de Renán Barrera y Mauricio Vila, con otros sectores tradicionales y emergentes en juego, Para el PAN, tanto a nivel nacional, como a nivel local, no le queda de otra o continuidad o cambio.