“Desarrollo turístico y sustentable”
En la víspera de la última visita a Quintana Roo de Andrés Manuel López Obrador como Presidente de la República, la directiva del Ejido Aarón Merino Fernández se pone a la vanguardia en preservación del medio ambiente.
* ¡Por una ciudad sostenible!
Por José Luis Barrón
El Ordenamiento Ecológico Local Comunitario Participativo (OELCP), esquema legal reconocido por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), es la base para que el Ejido Aarón Merino Fernández administre sus riquezas naturales, establezca sus planes de aprovechamiento y desarrollo sostenible sin que haya necesidad de una Área Natural Protegida (ANP) que desde hace años han intentado imponer consorcios capitalistas a través de seudo ambientalistas que usan como prestanombres.
En reciente conferencia de prensa, Manuel Jesús Poot Cojob —presidente del Comisariado Ejidal de Aarón Merino Fernández— antes de presentar el proyecto agradeció públicamente al mandatario Andrés Manuel López Obrador la oportunidad de que los núcleos agrarios puedan autorregular su desarrollo sustentable a través del OELCP y de esta manera poder manejar las tierras como mejor le convenga para el beneficio de todos los campesinos que componen dicho ejido.
Al respecto, tanto el líder ejidal como la consultora ambiental María Luisa Villarreal, explicaron a los representantes de los medios de comunicación que luego de cuatro años de investigaciones e intenso proceso consultivo, el ejido creará dentro de su territorio una ciudad “esponja”, consciente y resiliente al agua, que se convierta en una guía y ejemplo mundial.
“Para la protección ambiental y el manejo de recursos en Aarón Merino Fernández se considera mantener zonas permeables provista de vegetación en todo el territorio. corredores y Unidades de Gestión Ambiental (UGA’s) para proteger ecosistemas y recursos hídricos dentro de las zonas de conservación y de aprovechamiento sostenible, no como parches aislados, sino como corredores que faciliten la conectividad entre diferentes zonas, asegurando la continuidad de procesos ecológicos e hidrológicos esenciales para la región”, detallaron.
En ese sentido, Roberto Salgado Sangri, presidente del Consejo Comunitario de la Cuenca de la Laguna de Bacalar (CONCLAB) destacó: “Esto demuestra de que los propios ejidos pueden autorregularse por lo que no es necesario ningún ANP, Sitio Ramsar o Hábitat Crítico que, desde hace siete años, han pretendido imponer en el sistema lagunar Bacalar-Chetumal políticos y empresarios amparados en organizaciones seudo ambientalistas, como Amigos de Sian Ka’an, que solo buscan el control del agua y tierras costeras”.
La investigadora María Luisa Villarreal precisó que el documento base de desarrollo integral nace de una decisión de la comunidad ejidal para crear un área destinada voluntariamente a la conservación, con ordenamiento ecológico propio y hasta un programa de desarrollo urbano para un asentamiento humano reconocido por el Registro Agrario Nacional.
Por su parte el empresario turístico Rodolfo Valle Villaseñor consideró que es oportuno para los demás ejidos y pequeños propietarios establecidos en la Cuenca Lagunar de Bacalar adoptar un instrumento de esta naturaleza para anular cualquier pretensión de querer imponer una medida restrictiva que frene el desarrollo del Sur de la entidad.
Asimismo, agregó: “pediría a esas autoridades con intenciones de conservación que nos ayuden a resolver los problemas principales de contaminación como los tiraderos a cielo abierto y drenaje sanitario, que provocan deterioro al medio ambiente, desde Huay Pix hasta Buenavista”.
Entre otras personalidades además de los ya mencionados destacó la presencia del ingeniero forestal Hugo Galleti y del restaurantero Samuel Acuña Jenkin, quienes manifestaron su total respaldo a esta iniciativa del Ejido Aarón Merino Fernández, el cual se pone a la vanguardia de un desarrollo sustentable de beneficio para los propios habitantes de los municipios de Bacalar y Othón P. Blanco.
