Desfile militar marca el inicio de la transición presidencial en el Zócalo Capitalino
El tradicional desfile militar en conmemoración del 214 aniversario de la Independencia de México se convirtió en un símbolo de transición política, donde las Fuerzas Armadas no solo despidieron al presidente Andrés Manuel López Obrador, sino que también ofrecieron su lealtad a la futura presidenta, Claudia Sheinbaum Pardo, quien asumirá el poder el 1 de octubre de 2024. Este último desfile de López Obrador como comandante supremo marcó un punto crucial en la relación entre las Fuerzas Armadas y la administración saliente, a la vez que abrió la puerta a la nueva era bajo el liderazgo de Sheinbaum.
Un desfile cargado de simbolismo
El evento, celebrado en el Zócalo de la Ciudad de México, no fue un desfile militar común. A lo largo de su sexenio, López Obrador ha otorgado un papel protagónico a las Fuerzas Armadas, tanto en la seguridad pública como en la construcción de las grandes obras de infraestructura de su gobierno, como el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, la refinería Olmeca y el Tren Maya. En ese contexto, el desfile también sirvió para destacar el legado militar que López Obrador entregará a su sucesora.
El presidente, acompañado de los titulares de la Marina, el almirante José Rafael Ojeda, y de la Defensa Nacional, el general Luis Cresencio Sandoval, recorrió a pie la Plaza de la Constitución para izar la bandera monumental, antes de pasar revista a los 15 mil elementos de las Fuerzas Armadas y la Guardia Nacional desde un vehículo descubierto.
Agradecimientos y transición de mando
Durante el evento, tanto Ojeda como Sandoval rindieron cuentas al presidente saliente sobre los proyectos y labores en las que las Fuerzas Armadas participaron bajo su mando. Ambos destacaron el fortalecimiento institucional y el papel clave que jugaron en la Cuarta Transformación.
Ojeda, en un mensaje cargado de emotividad, expresó: “Hemos dejado el corazón en cada uno de estos proyectos, respondemos a la confianza y al lugar privilegiado que nuestro pueblo le ha otorgado a la Secretaría de Marina Armada de México”. Asimismo, el almirante se dirigió a Sheinbaum, señalando que la Marina está lista para recibir sus órdenes, en lo que será un hito histórico: “Nuestro pueblo ha expresado su voluntad, estamos listos para tener como presidenta a la primera mujer en nuestra historia”.
Por su parte, Sandoval, quien será reemplazado por Ricardo Trevilla Trejo en el nuevo gobierno, agradeció a López Obrador por la confianza depositada en las Fuerzas Armadas y aseguró que el Ejército y la Fuerza Aérea están listos para afrontar los retos de la próxima administración. “Nos hemos acercado más al pueblo y estamos prestos para seguir cumpliendo las instrucciones de nuestra futura Comandante Suprema en beneficio del pueblo de México”, afirmó el general.
Desfile militar marca el inicio de la transición presidencial: Fuerzas Armadas se preparan para el mando de Claudia Sheinbaum
El papel central de las Fuerzas Armadas en la próxima administración
El desfile no solo fue un reconocimiento a la gestión de López Obrador, sino también una clara señal de la continuidad del protagonismo de las Fuerzas Armadas en la nueva administración. La presidenta electa, Claudia Sheinbaum, ha dejado en claro que mantendrá el enfoque de seguridad pública heredado de su predecesor, con las Fuerzas Armadas y la Guardia Nacional jugando roles esenciales.
Sin embargo, el legado de militarización que deja López Obrador no ha estado exento de controversia. Aunque el presidente prometió inicialmente devolver a los soldados a los cuarteles, la realidad ha sido distinta, ya que las Fuerzas Armadas se han involucrado en tareas de seguridad pública bajo el argumento de combatir el crimen organizado. Esto ha generado críticas de sectores que denuncian violaciones a los derechos humanos y acusan a los militares de cometer abusos de poder.
Un nuevo comienzo bajo la sombra del debate sobre militarización
La llegada de Sheinbaum al poder se produce en un contexto de debate sobre el papel de las Fuerzas Armadas en la vida pública de México. Las reformas aprobadas por el Congreso en 2022 extienden su participación en labores de seguridad hasta 2028, mientras que la Guardia Nacional, que originalmente nació como una institución civil, ahora está bajo el mando del Ejército.
El desafío para Sheinbaum será mantener el equilibrio entre el fortalecimiento de las instituciones castrenses y garantizar el respeto a los derechos humanos, en un país donde la violencia y el crimen organizado continúan siendo problemas urgentes. Su liderazgo será clave para definir el rol de las Fuerzas Armadas en los próximos años, un tema que seguirá siendo centro de atención tanto a nivel nacional como internacional.
Este histórico desfile no solo marca el final de una era, sino el inicio de un nuevo capítulo en la política mexicana, donde las Fuerzas Armadas seguirán siendo un actor central bajo el mando de la primera mujer presidenta del país.
