La ultraderecha entra por Nuevo León
La ultraderecha empieza a penetrar en las elecciones de 2024 como la humedad, en silencio, de manera discreta pero contundente. Y qué mejor lugar que Nuevo León, donde hay un conservadurismo que no se atreve decir su nombre.
Ante la decadencia de la derecha en México, pareciera prepararse un grupo de choque, en nombre de Dios, con consignas fascistas. Esa es la organización Vida, surgida de la Iglesia evangelista y encabezada por el pastor Jaime Hernández, un carnicero que mata 400 reses diariamente y que se dice defensor de la vida, la ultraderecha intenta revivir.
El simple hecho de que la cúpula y militancia del partido local Vida sean pastores evangélicos, nulifica cualquier actividad política; sin embargo, a las autoridades electorales parece que les llegaron al precio porque ya tienen registro en esa entidad.
Se trata de una mafia de evangelistas, que quiere imponer ideas conservadoras en la política autorización de Vida como Asociación fue otorgada por la Notaría No. 47, ubicada en Paseo del Pedregal 938, del Lic. Alfredo Moguel Morán, también evangelista.
El partido estatal Vida, está a favor de las terapias de conversión y es enemigo de la legalización del aborto. Es un partido surgido de una reunión de pastores evangelistas con la ultraderecha del país. En sus inicios el representante legal de la organización que comanda Jaime Ochoa, era nada menos que René Bolio Halloran, quien en 1986, se integró al PAN, donde se desempeñó como Coordinador de Estados y director nacional de Organización del Comité Ejecutivo del partido. En la Legislatura de 2000-2006 fungió como suplente de la senadora Cecilia Romero, miembro activo de El Yunque.
Se recordará aquel incidente a las puertas de la embajada cubana protagonizada por el ex senador panista, quien insultó al personal de la sede diplomática. Algo que hace pensar en la irrupción de la embajada de México en Quito también por ultraderechistas de Ecuador.
Bolio tiene un largo historial como activista anticastrista, pero se dice presidente de la Comisión Mexicana de Derechos Humanos, una asociación patito de derecha al cuidado de los intereses de los cubanos de Miami.
En su delirio fascistoide Bolio, acompañado de la sobrina de Felipe Calderón, Mariana Gómez del Campo, señaló en ese momento en medio de golpes, amenazas y empujones al interior de Cuba, “están asesinando, torturando y arrestando a ciudadanos cubanos”. Se dio a conocer por su activismo anticubano en 2012 cuando financió y organizó a jóvenes mexicanos, militantes del PAN, para entrar a La Habana con visa de turistas y escandalizar en las iglesias de la ciudad, previo a la visita del entonces papa Benedicto XVI.
Esta misión la fraguó con el apoyo de la Organización Demócrata Cristiana de América y el Directorio Democrático Cubano con sede en Miami, dirigido por Orlando Gutiérrez Boronat, cubano, quien es pagado por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, la misma que en México financia a Mexicanos contra la Corrupción de Claudio X. González y que encabeza Amparo Casar) y abiertamente pide una intervención armada contra Cuba.
Tanto Bolio como su jefa, Cecilia Romero, fueron dirigidos por el esposo de ésta, Emilio Baños Urquijo, hermano de Fernando Baños Urquijo, exdirigente del Movimiento Universitario de Renovadora Orientación (MURO), organización de ultraderecha que, durante los 60, persiguió y torturó a militantes de izquierda.
Desde 2000, con el arribo del PAN a la presidencia de México, Cecilia Romero, su familia, aliados anticubanos y subordinados como René Bolio, han utilizado a México como sede de cursos, encuentros y entrenamientos de la mafia anticubana. En 2015, previo a la Cumbre de las Américas de Panamá, la cual reunió a los presidentes Barack Obama y Raúl Castro por primera vez, el PAN, la OCDA y la alemana de ultraderecha Fundación Konrad Adenauer, pagaron la estadía en la Ciudad de México de algunos líderes anticubanos para ser capacitados en maniobras de boicot durante la Cumbre. Desde Miami llegó Orlando Gutiérrez Boronat, para ser uno de los capacitadores.
René Bolio y Orlando Gutiérrez Boronat dirigieron la organización Cuba Justicia, la cual aglutina una lista de funcionarios cubanos a quienes acusa de violaciones a derechos humanos. Es financiada por la USAID y cuenta con el apoyo de la mafia anticubanas de Miami, a través del Directorio Democrático Cubano. Ambos, han recorrido Latinoamérica para promover su agenda contra la Revolución Cubana, invitados por organizaciones y partidos de derecha.
Ahora Vida, que asesora jurídicamente Bolio, se disfraza, de organización civil, ocultando su credo y lanza al analfabeta Pato Zambrano, a la candidatura por la presidencia municipal de Monterrey, logrando obtener su registro estatal pero el triunfo.
Vida ya había hecho un intento de ganar la presidencia municipal de Monterrey, con un joven pastor llamado Pako Sánchez, con varias denuncias penales por maltrato familiar, pero declinó ante la derrota clara que le esperaba, terminó or declnar por Colosio a quien le profesa un enorme cariño.
Zambrano ha participado en las elecciones para buscar la alcaldía en 2015 y 2018. En las elecciones del 2021 también buscó ingresar al servicio público con una diputación de la alianza ‘Va Fuerte por Nuevo León’, compuesta por el PRI y PRD.
Por un lado, la ultraderecha más activa y, por el otro, la penetración evangélica en la política nacional son dos factores que en México no tienen cabida.
La ausencia de oposición real crea posibilidades muy peligrosas para que la ultraderecha se convierta en interlocutora del poder, por lo que debe desenmascararse esta farsa llamada Vida, cuanto antes.