Mujer pelea contra cocodrilo para salvar la vida de su esposo
El cuerpo humano es algo increíble, especialmente por su instinto de preservación de la vida. Cuando el cuerpo se siente amenazado hará todo lo posible por ponerse a salvo o bien, eliminar dicha amenaza. Sumado a esto tenemos la adrenalina, la cual es una sustancia que “potencia” todas nuestras habilidades. Ahora hablaremos de un caso impresionante donde una Mujer pelea contra un enorme cocodrilo de 4 metros para poder salvar la vida de su esposo.
No es la primera vez que un humano desafía a uno de estos depredadores, hace unos meses hablamos de un hombre que literalmente mordió a un cocodrilo para sobrevivir.
Mujer pelea contra cocodrilo para salvar a su esposo.
Esté evento que parece salido de una película ocurrió en Sudáfrica, todo empezó cuando la familia decidió ir a un lago para un picnic, esto era algo habitual para ellos. Todo dio un brusco giro cuando el hijo de la pareja se encontraba pescando y le informó a su padre que el sedal se había atascado en un tronco cercano. Anthony decidió ayudar a su hijo, pero el infierno se desató en cuanto puso los pies en el agua.
Él menciona que en cuanto entró al agua oyó una gran explosión y no pudo ver nada, lo siguiente que supo es que se encontraba sumergido y lo único que podía ver eran los enormes dientes del reptil y sus grandes ojos. En cuestión de milisegundos comprendió lo que estaba pasando y empezó a luchar, pero era inútil.
Es aquí donde entra nuestra protagonista pues corrió a la escena junto a un amigo que estaba en el picnic con ellos. Johan sujetó fuertemente a Anthony para evitar que el cocodrilo lo arrastrará a aguas más profundas. Por su lado Annalise agarró lo primero que vio, que resultó ser un enorme tronco que en circunstancias normales hubiera sido imposible de levantar, gracias a la adrenalina lo levantó como si no pesará nada y empezó a golpear al animal en la cabeza hasta que abrió la boca y dejo ir a su esposo.
Acto seguido el hombre recibió los primeros auxilios y fue llevado al hospital donde estuvo internado para su recuperación. Ahora se encuentra en perfecto estado físico, solo con cicatrices en sus piernas. Por otro lado, su salud mental no tuvo la misma suerte pues desarrolló Síndrome de Estrés Postraumático. Ahora le tiene fobia al agua y tiene pesadillas con el reptil. Ya se encuentra acudiendo con profesionales, pero es un proceso lento.