Los desplantes del bribón mentiroso
Cada día que pasa el señor Presidente de la Republica vierte al menos unas treinta mentiras para encubrir sus verdadera finalidad que no es otra cosa más que el engaño. Si de alguien puedo señalar algo bueno es de Ernesto Zedillo Ponce de León, quien siempre fue un caballero durante su mandato presidencial, y aunque al idiota de Palacio Nacional no le guste, nunca podría ni siquiera llegarle a los talones al Doctor Zedillo.
Andrés Manuel López Obrador se vanagloria de no haber pertenecido al proyecto neoliberal, y ahora le dio por señalar que Ernesto Zedillo Ponce de León es un representante de la oligarquía y de haber entregado los bienes del pueblo. Pero no tan solo eso, se ve que el inquilino de Palacio está desesperado por encontrar un motivo para lanzar sus perros al ruedo para que muerdan a quien se le ponga enfrente.
Por principios de cuenta el señor Ernesto Zedillo Ponce de León, no es como el señor Andrés Manuel López Obrador, porque es un hombre que a pesar de la distancia en el tiempo los mexicanos lo seguimos apreciando por su condición de retirarse una vez terminado su encargo y radicarse en otro país donde hasta ahora ha sido uno de los mejores catedráticos, y para muestra ahí están los elogios de sus alumnos.
Usted señor Presidente Andrés Manuel López Obrador nunca ha sido un hombre ejemplar, por el contrario, ha sido un asaltante del poder, porque usted asaltaba a Presidentes Municipales y a los gobernadores, señalándoles que de no pagarle le diría cifras inventadas a quienes asistían a sus múltiples mítines que organizaba para mantener su activismo durante muchos años.
Y mire usted Señor Presidente de la Republica, no soy un defensor del señor Zedillo, pero haciendo una comparación usted no le llega ni a los talones en cuanto a decencia, sapiencia y resultados. Porque hasta ahora usted es el mayor ladrón que ha tenido la historia de este país, y por cierto, ojalá hubiera usted estado en el régimen de Ernesto Zedillo, porque siempre se comportó como un caballero, y no como un ladrón de cuatro suelas como lo ha sido toda su vida.
Que yo sepa, el señor Zedillo nunca extorsiono a empresarios para que le entregaran grandes cantidades de dinero, como usted lo ha hecho, el Doctor Zedillo nunca se atrevió a utilizar los excedentes petroleros, esos que usted y sus hijos han llevado a al bolsillo. Que yo sepa el Presidente Zedillo no tiene hijos que hacen grandes negocios, pero usted si tiene a tres ladrones que han seguido aprendiendo muy bien como robarse el dinero de los mexicanos. Usted, Presidente, es el mayor ladrón que ha tenido este país. Sus hijos también pisarán la cárcel, de eso puede tener la seguridad. Al tiempo.
